Cómo Hacer Bubble Hash (3 Métodos)

¿Quieres convertir tu cosecha casera en un cargamento de hachís? Si tienes un montón de recortes o de cogollos, utiliza este método seguro y de eficacia probada para crear lo que se conoce cariñosamente como bubble hash (hachís de burbujas).

El hachís es un concentrado de cannabis que está compuesto principalmente por los tricomas resinosos de los cogollos y las hojas de la planta de marihuana. Hay muchas formas de hacer hachís, pero todas consisten en separar y prensar los tricomas.

Estos métodos se han utilizado tradicionalmente en lugares como Afganistán o Marruecos, donde el cannabis se restregaba sobre tamices finos para extraer sus tricomas, que luego se prensaban y calentaban para crear un bloque oscuro, denso y muy potente.

El bubble hash es básicamente una versión moderna de este proceso milenario, pero utiliza agua y hielo para conseguir unos resultados más refinados. A continuación vamos a repasar los fundamentos de este exclusivo tipo de hachís, y a explicar cómo prepararlo en la comodidad de tu hogar con tres métodos, todos ellos aptos tanto para principiantes como para consumidores con más experiencia.

¿Qué es el bubble hash?

A veces también conocido como hachís de agua, hachís de hielo, ice-o-lator o hachís full melt, el bubble hash se consigue separando los tricomas del material vegetal con ayuda de hielo, agua y bolsas de malla (también llamadas "bubble bags"). Esta es una de las formas más efectivas de conservar los terpenos y los cannabinoides, a la vez que se crea un producto altamente refinado, sin exponer tus cogollos a solventes (como butano o propano) ni a un calor excesivo. El resultado es un producto con un sabor increíble y unos efectos intensos, que prácticamente cualquiera puede hacer en casa con el equipo adecuado.

Es posible que te estés preguntando cómo se puede preservar la calidad de los tricomas cuando se mezclan con agua, pero los cannabinoides no son solubles en agua, por lo que no se disolverán en el líquido y conservarán su integridad. El hielo, el agua y el movimiento de agitación simplemente sirven para separar los tricomas de los cogollos de una manera más efectiva.

El bubble hash se llama así por el resultado final. Un bubble hash full melt de buena calidad "burbujea" cuando se calienta, gracias a la alta concentración de tricomas y a la ausencia de materia vegetal, lo que hace que se asemeje mucho a los concentrados que se suelen vender en los dispensarios legales.

Bubble hash y kief

El kief es esencialmente un conjunto de tricomas secos sin procesar y combinados con una cantidad muy pequeña de material vegetal. Si abres la cámara inferior de un grinder de varios pisos, el polvo fino que se acumula en ella es el kief. Históricamente, esto se hacía a mayor escala restregando el cannabis sobre unos tamices finos, para desprender el kief de la hierba y crear una pila de "polen" bajo del tamiz. Y a continuación, ese kief se prensaba para obtener un producto muy potente.

Pero el bubble hash va más allá de este proceso de frotamiento, y expone los cogollos al agua y al hielo para separar el material residual de los tricomas y dar lugar a un producto más puro y uniforme.

En resumen, el kief es una forma de hachís muy poco refinada, mientras que el bubble hash es más puro.

¿Qué ventajas ofrece el bubble hash?

Hay varias razones por las que los aficionados a la marihuana preparan y consumen bubble hash.

Hachís al alcance de tu mano

A la gente le encanta el hachís, pero dependiendo de dónde vivas, puede ser difícil conseguirlo. El bubble hash te permite hacer hachís casero y obtener un producto altamente potente que se puede consumir por sí solo o añadir a canutos y cazoletas.

Seguro y sin solventes

Uno de los mejores aspectos del método de preparación del bubble hash es que no utiliza solventes. En este contexto, el agua no se considera un solvente, ya que los tricomas no son solubles en ella. A diferencia de cuando se preparan aceite de hachís al butano (BHO) y otros concentrados con disolventes, este método evita los peligros asociados con los restos de solventes y el riesgo de que se produzca una explosión. Además, no hay que tener mucha experiencia para hacer bubble hash. Incluso los novatos podrán hacerlo con el equipamiento adecuado.

Una forma estupenda de usar los recortes

Si quieres, puedes usar tus cogollos para crear montañas de bubble hash, pero también se pueden extraer los tricomas de las partes de la planta de marihuana a menudo ignoradas, como los recortes y las hojas de azúcar. Cuando esté todo bien concentrado, tendrás un producto muy potente.

Es discreto

A diferencia del proceso de preparación de los comestibles y ciertos concentrados de marihuana, el método para hacer bubble hash es muy discreto porque no produce un olor fuerte.

Cómo hacer bubble hash - método 1: bubble hash con filtros de café

Este método casero es muy sencillo, por lo que el producto final no será tan puro como el de los de más abajo. Aun así, la "técnica del filtro de café" es muy efectiva y, como se suele decir, la práctica hace al maestro.

Utensilios

• Cogollos y/o recortes (7-14 gramos por lote)
• Frasco de vidrio con tapa (0,5-1 litros)
• Tamiz de cocina o tela de mosquitero para ventanas
• Filtros de café
• Tijeras

Frascos Para Curar Hierba

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Instrucciones

1. Desmenuza bien el material vegetal con las tijeras, especialmente si vas a usar cogollos. Deberás exponer la máxima cantidad de superficie posible al agua helada.

2. Frota los cogollos o recortes contra el tamiz o mosquitero para soltar el kief y quedarte con los tallos, hojas y exceso de material. Lo mejor es hacerlo directamente sobre el frasco de vidrio, para no tener que estar trasladando el kief de una superficie a otra. Procura llenar solamente ¼ del frasco con el kief.

3. A continuación, llena el frasco con agua helada hasta casi el borde, cierra la tapa, y agítalo con fuerza hasta que todo el polvo se haya mezclado con el agua. Para conseguir los mejores resultados, pon el frasco en un mezclador de pintura (si tienes uno). En cualquier caso, tendrás que agitarlo hasta que no queden grumos de material vegetal.

4. Espera 30 minutos como mínimo. Abre el frasco y retira el material vegetal que esté flotando en la superficie, ponlo en otro frasco, y repite el proceso hasta que no quede nada de material.

5. Espera otros 15-30 minutos para que la mezcla repose en el frasco. Deshazte del agua con cuidado hasta que solo queden un par de centímetros en el fondo. El material de la parte inferior del frasco es tu hachís.

6. Llena otra vez el frasco con agua fría y deja reposar la mezcla de nuevo durante un mínimo de 15 minutos.

7. A continuación, cuela lentamente y con cuidado el agua y el hachís con un filtro de café, procurando no derramar nada. Cuando haya escurrido toda el agua, envuelve la resina en el filtro, y exprime hasta la última gota de humedad.

8. Cuando termines, pon el filtro y la resina sobre papel absorbente. Esto ayudará a eliminar los restos de humedad que queden.

9. Cuando este envoltorio esté completamente seco, quita el papel absorbente y desenvuelve con cuidado el filtro. Raspa la resina del filtro y ¡tachán!, ya tienes tu hachís listo.

10. Este hachís se puede fumar con una pipa, pero primero tendrás que prensarlo para formar una masa sólida. Lávate y sécate las manos, y apriétalo firmemente con los dedos hasta que esté duro. Si no lo prensas con suficiente fuerza, el hachís se volverá líquido en cuanto le acerques una fuente de calor. Cuando lo fumes, tu bubble hash deberá burbujear.

Método 2: bubble hash con bubble bags

Para este método de creación de bubble hash es necesario realizar una inversión un poco más especializada, pero el material durará más que los filtros de café (y se podrá reutilizar), y además se pueden conseguir cantidades más grandes. Es posible que este método te parezca más sencillo a la larga, empezando por la posibilidad de raspar el hachís de las bubble bags con más facilidad.

Utensilios

• 50-250g de cogollos o recortes
• 2 cubos grandes
• Algo para remover la mezcla
• Bolsas filtrantes de micrones o bubble bags (cuanto más finas, mejor)

Ice-O-Lator Pequeño

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Instrucciones

Para calcular cuánta hierba necesitas, la regla general es que 10 gramos de cogollos producen alrededor de 1 gramo de hachís; aunque esto dependerá en gran medida de la calidad del material utilizado.

1. Pon los cogollos/recortes en uno de los cubos, y añade suficiente agua y hielo para cubrirlos del todo. Ahora viene la parte divertida: revuelve todo durante al menos 15 minutos.

2. Prepara las bolsas de malla en el segundo cubo. Ponlas unas dentro de otras en función del tamaño de sus mallas (cada vez más finas), y sujétalas de forma que puedas vaciar el contenido del primer cubo a través de ellas sin problemas.

3. Vierte el líquido sobre este sistema de filtración de varias capas, con cuidado de no derramar el agua por los lados. Deja reposar 15 minutos.

4. Empieza a sacar las bolsas con cuidado, comenzando por la de la parte superior. Escúrrela y ponla a un lado. Esta será la bolsa que contenga la mayor parte del material vegetal. Sin embargo, como verás a medida que continúes retirando y drenando las bolsas, el hachís estará cada vez más refinado, hasta que llegues a la última bolsa, donde solo habrá una pequeña cantidad de material: este es el hachís de mayor concentración.

5. Recoge los tricomas de esta última bolsa y extiéndelos sobre una superficie lisa y seca durante varias horas. Cuando se sequen, tendrás un material de alta calidad para prensar en un bloque.

6. Dependiendo del número de filtros que utilices, es posible que encuentres un bubble hash de calidad aceptable en las otras bolsas, pero lo mejor es evitar cualquier material vegetal en la medida de lo posible.

Método 3: bubble hash con el Bubbleator B-Quick

El Bubbleator facilita muchísimo el proceso de elaboración del bubbler hash. De hecho, la parte que tarda más tiempo es la espera hasta que se secan los cristales.

Utensilios

• 50-250g de cogollos o recortes
• Bubbleator B-Quick con bolsas de cremallera y micrones
• Cubo grande

Bubbleator B-Quick

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Instrucciones

1. Coloca los recortes en la bolsa con cremallera incluida y ciérrala bien. Ponla dentro del Bubbleator y llénalo, mitad con agua y mitad con hielo, hasta que alcance una temperatura de 4°C. Cierra la tapa, enciende el dispositivo y programa el temporizador para que funcione durante 15 minutos.

2. Pon las otras dos bolsas una dentro de la otra, y colócalas en el cubo grande. Ajusta el exceso de tela alrededor del borde para que no se escape nada de agua.

3. Cuando la máquina termine, retira con cuidado la bolsa de los cogollos/recortes. Transfiere su contenido al cubo con los filtros, y deja que escurra por completo.

4. Saca los dos filtros que contienen el hachís, prestando especial atención a la bolsa con la malla más fina. Exprime con cuidado el agua, y déjala secar sobre papel absorbente durante 24 horas. Obviamente, la bolsa más fina producirá el mejor hachís, mientras que la más grande se llenará principalmente de material vegetal residual.

Clasificación del bubble hash

No todos los bubble hash son iguales. En general, la calidad de tu producto dependerá de lo finas que sean las bolsas o filtros, es decir, cuanto más fina sea la malla, mejor. La potencia y el sabor originales de la variedad utilizada también influirán en la calidad del producto final. Aquí tienes un resumen de cómo se suele clasificar el bubble hash.

⭐ 1-2 estrellas

Es el bubble hash de menor grado. Es seco, tiene un alto contenido de material vegetal, y contiene menos de un 50% de tricomas. No es apto para fumar ni dabbear por sí solo, pero se puede utilizar para hacer comestibles o añadir a un porro normal para aumentar su potencia.

⭐3-4 estrellas

Con menos residuos que el de grado más bajo, este hachís se derrite un poco más gracias a una mayor ausencia de material vegetal. Se puede añadir a una cazoleta e incluso dabbearse, pero no se derretirá por completo.

⭐5-6 estrellas

Bubble hash full melt de la máxima calidad. Únicamente contiene cabezas y tallos de tricomas, y por lo tanto se derretirá y burbujeará estupendamente cuando le apliques calor. No contiene material vegetal ni residuos, así que este producto se puede dabbear, vapear y fumar por sí solo sin problemas. Este tipo de bubble hash se crea solamente cuando se utiliza un filtro fino, adecuado para atrapar solo los tricomas.

Preguntas frecuentes sobre el bubble hash

Haz tu propio bubble hash hoy mismo

El bubble hash es una excelente forma de usar tus recortes o cogollos para crear un concentrado de marihuana potente y seguro, que se puede fumar, dabbear, vaporizar e ingerir (después de descarboxilarlo). Se trata de un proceso muy entretenido que no produce olores, por lo que es ideal para muchos cultivadores caseros. Y aunque se necesita practicar para perfeccionarlo, la mayoría de los aficionados al hachís opinan que merece la pena.

Marguerite Arnold

Marguerite Arnold is a German-American cannabis industry expert. She covers the industry as a journalist, including for top cannabis magazines such as High Times, and has written two books on the topic (so far). She is also a member of the industry as an entrepreneur and consultant.

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