Cómo Acelerar La Floración Y La Cosecha Del Cannabis

Puede que la paciencia sea una virtud, pero no es totalmente necesaria para cultivar buena hierba. Algunos cultivadores tienen el lujo de poder dedicar tiempo y atención a sus plantas, a lo largo de varios meses. Pero otros no tienen tanto tiempo y necesitan acelerar las cosas. Ya sea para evitar ser descubierto por las autoridades locales, o porque vives en una zona con una temporada de cultivo corta, aquí tienes algunos consejos para cosechar lo antes posible.

LA SELECCIÓN DE LA CEPA

La selección de la cepa juega un gran papel en el tiempo que tarda una planta en alcanzar la cosecha. Algunos tipos de cannabis florecen con extrema rapidez. Estas variedades son más adecuadas para los cultivadores con prisas.

ESCOGE UNA CEPA FOTOPERIÓDICA DE FLORACIÓN RÁPIDA

Las cepas fotoperiódicas son variedades que empiezan a florecer cuando se acorta el ciclo de luz. Este es un cambio natural que se produce en respuesta al cambio de verano a otoño. Generalmente, las variedades sativa producen un efecto cerebral y energizante, y suelen ser más altas y productivas que las variedades índica. Pero esto tiene una contrapartida: una fase de floración más larga.

Las cepas índica principalmente producen efectos sedantes y relajantes. Las plantas tienden a desarrollar una estructura más arbustiva y no son tan altas como las sativas. Las variedades índica suelen tener un período de floración mucho más corto que las sativas, por lo que son más apropiadas para tener cosechas rápidas. Son la opción preferida por los cultivadores clandestinos y por quienes quieren cosechar lo antes posible. Pueden aplicarse técnicas de entrenamiento a las plantas para que ocupen el menor espacio posible, sin que por ello dejen de producir cosechas rápidas y satisfactorias.

ELIGE CEPAS AUTOFLORECIENTES

Las variedades autoflorecientes no requieren cambios en el ciclo de luz para empezar a florecer, sino que florecen automáticamente tras un período de tiempo determinado por su genética. Estas son las cepas de referencia para quienes buscan resultados rápidos. Con frecuencia, estas cepas tan veloces pasan de ser una semilla a una planta plenamente madura en 8 semanas. Es más, las plantas no suelen superar una altura de 1m, por lo que puedes cultivarlas en espacios pequeños y ocultos. A los cultivadores de guerrilla y los cultivadores caseros a pequeña escala les encantan las autoflorecientes, porque permiten un cultivo más discreto.

Hubo un tiempo en que los cultivadores evitaban las autoflorecientes por su baja productividad y sus niveles mediocres de THC. Sin embargo, las variedades modernas rivalizan con muchas cepas fotoperiódicas en cuanto a potencia y productividad.

CÓMO ACORTAR EL TIEMPO TOTAL DE CULTIVO

Escoger una cepa rápida no es la única forma de minimizar el tiempo de cultivo. Hay otras formas de dar un empujoncito a tus plantas en la recta final. A continuación, mostramos una lista de trucos y consejos para acelerar las cosas.

MENOS HORAS DE LUZ POR DÍA

En el caso de las cepas fotoperiódicas, puedes acelerar considerablemente el ciclo de cultivo exponiendo las plantas a unas 10–11 horas de luz al día. Al reducir la exposición a la luz, engañarás a las plantas haciéndoles creer que el otoño está a la vuelta de la esquina. Y, al ser organismos inteligentes, las plantas empezarán a florecer para poder reproducirse antes de que llegue el frío. Los cultivadores pueden aprovechar este mecanismo para saltarse la fase vegetativa. De este modo, las plantas no serán tan altas ni producirán cosechas tan abundantes, pero estarán listas para cosechar en cuestión de semanas, en lugar de meses.

FUERZA LA FLORACIÓN DEL CANNABIS EN EXTERIOR

Si cultivas al aire libre, puede que hayas puesto los ojos en blanco ante la idea de reducir la exposición a la luz. Pero esta técnica no se limita al cultivo interior. Quienes plantan en exterior también pueden manipular el ciclo de luz, cubriendo las plantas para limitar la exposición a la luz a 10-11 horas diarias. Para ello, puedes hacer una estructura de madera y forrarla con un material opaco. La estructura puede ser pequeña, para una sola planta, o más grande para varias plantas. Puedes empezar a cubrir tus plantas desde la fase de plántula, para alcanzar la cosecha lo antes posible. Pero esta técnica tiene un pequeño inconveniente: si olvidas taparlas, las plantas volverán a la fase vegetativa, por lo que debes ser muy meticuloso.

CULTIVA EN INTERIOR

Los cultivadores de interior prácticamente tienen el control absoluto del ambiente de cultivo. Esto significa nada de sequías, olas de calor, ni inundaciones. Y también les permite manipular el ciclo de luz, con solo apretar un botón. En exterior, los cultivadores no pueden controlar el sol; pero, en interior, pueden usar un simple temporizador para garantizar que sus plantas reciban la cantidad deseada de fotones cada día. Puedes engañar a las plantas haciéndoles pensar que es de noche antes de que se haya puesto el sol. Con este nivel de control sobre los factores ambientales, es más fácil avanzar la cosecha.

USA ESQUEJES

Los esquejes son ramas cortadas de una planta madre, que se introducen en tacos de enraizado para desarrollar raíces y después se trasplantan directamente a la tierra o a un cultivo hidropónico. La ventaja de los esquejes es que, básicamente, te saltas la germinación y la fase de plántula inicial. Una vez hayas trasplantado un esqueje, empezarás el cultivo con una pequeña planta en fase vegetativa, en lugar de una semilla; la primera parte del proceso ya ha pasado. Solo tienes que esperar a que tu planta crezca un poco antes de iniciar la floración.

CULTIVA HIDROPÓNICAMENTE

Las plantas hidropónicas crecen en un sustrato sin tierra, suspendidas sobre un depósito de agua. Sus raíces crecen directamente en el agua, donde pueden absorber los nutrientes fácilmente. Los cultivos hidropónicos se asocian a plazos de floración más rápidos y cosechas impresionantes. Para cosechar lo antes posible es recomendable cultivar hidropónicamente, ya que esto acelerará la fase vegetativa considerablemente. Cuando decidas forzar la floración, tus plantas ya serán grandes y vigorosas.

MÁS LUZ DURANTE LA FASE VEGETATIVA

La fase vegetativa se caracteriza por un crecimiento explosivo. Durante esta etapa, las plantas intentan crecer el máximo posible, para maximizar el número de flores. Cuanto más grande sea la planta, mayor será la cosecha (en la mayoría de casos). En la fase vegetativa, es importante proporcionar a las plantas una fuente de luz potente y consistente. Si puedes permitirte el coste de electricidad, puedes mantener tu cultivo bajo 24 horas de luz para optimizar el crecimiento. Las plantas convertirán esta luz en gran cantidad de azúcares vitales. Así, podrás inducir una floración temprana, sin sacrificar el tamaño o la productividad de las plantas.

En general, la iluminación puede ser un tema complejo. Existen diferentes tipos de luces y cada una tiene sus propias características.

FERTILIZA ADECUADAMENTE

Las plantas de marihuana requieren una amplia gama de nutrientes. Estos minerales son necesarios para cumplir varias funciones fisiológicas importantes. Sin estos, las plantas desarrollarían deficiencias nutricionales, lo que perjudicaría la cosecha. Las plantas autoflorecientes no necesitan tantos nutrientes, pero las cepas fotoperiódicas resultan especialmente afectadas ante la falta de minerales esenciales. En las distintas etapas del ciclo de cultivo, las plantas necesitan diferentes proporciones de nutrientes, por lo que sigue cuidadosamente las instrucciones del fertilizante elegido para evitar deficiencias y un crecimiento reducido.

Luke Sumpter

Licenciado en Ciencias de la Salud, y un apasionado del cultivo de plantas, Luke Sumpter trabaja desde hace 7 años como periodista y escritor profesional en la transversalización de la marihuana y la ciencia.

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