¿Cuáles Son Las Mejores Setas Para Comer?

Las setas comestibles ofrecen muchas ventajas: son ricas en vitaminas y minerales, tienen pocas calorías y son muy sabrosas. Estos organismos fúngicos están muy presentes en ciertas gastronomías y mucha gente los considera un superalimento. Tanto si comes setas como alternativa a la carne, como si simplemente te gusta añadirlas a tus platos, a continuación exploraremos las diversas ventajas para la salud asociadas a algunas setas culinarias, y también veremos cuáles son las mejores setas para comer.

¿Por qué comer setas?

Aunque ya hemos mencionado algunas, aquí tienes las principales ventajas de incluir setas en tu dieta:

• Ricas en vitaminas y minerales: Muchas setas comestibles son ricas en vitamina D, vitaminas del grupo B, fibra, proteínas y minerales (como cobre, selenio y potasio).
• Contienen antioxidantes: Los antioxidantes de algunas setas podrían contribuir a la salud inmunitaria.
• Gran diversidad: Existen numerosas variedades de setas comestibles, con una gama de sabores y texturas únicos.
• Bajas en calorías y grasas: Si buscas alimentos bajos en calorías o grasas, las setas son una excelente opción.
• Sustituto de la carne: Muchas personas vegetarianas, veganas y amantes de las setas las usan como alternativa a la carne, gracias a su textura robusta y su alta densidad nutricional.

¿Dónde crecen las setas comestibles?

Las setas, pertenecientes al reino de los hongos, crecen en diversas regiones del mundo. Suelen aparecer en entornos con mucha humedad y temperaturas moderadas, como bosques y praderas de zonas tropicales y subtropicales. Muchas variedades comestibles son originarias de Asia Oriental, aunque también crecen en otras regiones. Como sustrato, prefieren la madera muerta y en descomposición, estiércol, mantillo, hojas caídas y otras fuentes ricas en nutrientes. De hecho, las setas son el cuerpo fructífero de un hongo y aparecen por encima del suelo. Los esclerocios (también llamados trufas) crecen bajo tierra como masas endurecidas de micelio, que son los filamentos fúngicos que componen el espécimen de hongo.

Aunque hay quienes recolectan setas comestibles en la naturaleza, la gran mayoría de setas que se venden en los mercados se han cultivado en condiciones controladas. Esto se hace para garantizar que las setas cumplan la normativa de seguridad alimentaria, y para optimizar el crecimiento y la consistencia de las setas. El proceso de cultivo se lleva a cabo en condiciones esterilizadas, a partir de las esporas de una variedad concreta que se cultivan cuidadosamente hasta convertirlas en setas maduras, utilizando un sustrato adecuado (normalmente una mezcla rica en compost).

¿Qué setas se pueden comer?

Antes de comer cualquier tipo de seta, es fundamental saber si son inocuas. Aunque puedes tener la certeza de que las setas compradas en las tiendas son seguras para comer, recolectarlas en la naturaleza es otra historia. Muchos tipos de setas se parecen mucho entre sí, pero afectan a las personas de formas muy distintas. Algunas setas son venenosas, pudiendo causar desde síntomas relativamente leves hasta la muerte. Por tanto, no recomendamos recolectar setas silvestres, salvo que sepas exactamente cómo identificarlas.

¿Se pueden comer las setas crudas?

Este es un tema un tanto complejo. En la práctica, algunas setas culinarias se pueden ingerir crudas; sin embargo, se recomienda comerlas en cantidades moderadas. El principal problema de comerlas crudas es que pueden causar problemas digestivos, debido a la presencia de quitina, que es una sustancia fibrosa que nuestro cuerpo no digiere bien. Aunque generalmente se pueden ingerir en pequeñas cantidades, las personas con problemas gastrointestinales o un estómago sensible deberían evitar las setas crudas.

Y a diferencia de lo que muchos puedan creer, en comparación con las setas crudas, las setas cocinadas suelen ofrecer mayor disponibilidad de betaglucanos, vitaminas del grupo B y otros nutrientes. Además, la mayoría de gente coincide en que las setas cocinadas saben mejor que las crudas, con un sabor más rico y desarrollado.

No obstante, algunas setas se pueden comer crudas, como las siguientes: champiñón común, shiitake, crimini, champiñón portobello y seta ostra. Por el contrario, algunas setas comestibles no deben comerse crudas, ya que pueden causar molestias gastrointestinales por su alto contenido en quitina; entre estas se incluyen el rebozuelo, el hongo reishi, la colmenilla, las setas porcini y otras.

Mezcla ecológica de 7 hongos

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Cuándo no comer las setas

Como con cualquier otro alimento, debes asegurarte de que las setas estén en buen estado antes de añadirlas a tus platos. ¿Pero cómo puedes saber si están en mal estado? Hay varias señales para saberlo, y las más evidentes son el tacto y el olor. En cuanto al tacto, si las setas empiezan a estar viscosas, normalmente ya no se pueden consumir. Aunque la parte exterior de la seta se pueda limpiar o eliminar parcialmente, la integridad de la seta estará dañada. Y el mal olor es aún más revelador; si las setas huelen a podrido, pescado o amoniaco, no las comas.

Para que tus setas se mantengan frescas el mayor tiempo posible, debes procurar que haya suficiente circulación de aire y poca humedad. En este sentido, se recomienda sacarlas del envoltorio después de comprarlas, ya que el plástico puede acumular humedad fácilmente y hacer que se pongan viscosas en menos de una semana dentro de la nevera. Para que duren unos días más, ponlas en una bolsa de papel junto con papel de cocina y mételas en la nevera; así mantendrás a raya la humedad. Si las guardas de esta manera, las setas frescas enteras pueden durar hasta 10 días antes de que se deteriore su calidad.

Si quieres conservar las setas a largo plazo, tendrás que deshidratarlas; en este estado, pueden durar varios meses o más, si se guardan en condiciones adecuadas.

¿Son veganas las setas?

En pocas palabras: sí, las setas son veganas. No son un producto o subproducto de origen animal, y pertenecen a su propio reino de la naturaleza: el reino de los hongos (diferente al reino de los animales y al reino de las plantas). Sin embargo, hay cierta controversia en torno a algunas especies de setas que se alimentan de seres vivos, como por ejemplo las setas ostra, que consumen nematodos. Por tanto, estrictamente hablando, las setas ostra y el resto de setas que consumen criaturas del reino animal no son necesariamente veganas. Pero, en la práctica, muchas personas veganas consumen todo tipo de setas.

¿Qué setas son más saludables para comer?

¿Ya te ha entrado el hambre? Si tanto hablar de setas te ha abierto el apetito, ¡veamos algunas de las setas más saludables! Algunas de las que aparecen a continuación son perfectas para añadirlas a una gran variedad de platos, mientras que otras es mejor tomarlas en forma de extracto líquido o polvo. Conviene señalar que, aunque muchas de estas setas se están investigando en relación con determinados problemas de salud, aquí nos centraremos principalmente en su valor nutritivo.

Melena de león

Ya sea como ingrediente de un delicioso plato, o consumida en forma de extracto, la melena de león ofrece diversas ventajas nutricionales. Contiene vitaminas y minerales como niacina, tiamina, riboflavina, manganeso, potasio y zinc, además de antioxidantes. Esta seta de Asia oriental también es muy apreciada por su sabor suave y dulce y su textura carnosa, que a menudo se comparan con la carne de cangrejo. Es una de las setas más usadas en las prácticas holísticas tradicionales de China.

Extracto de melena de león (Hericium erinaceus)

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Champiñón común

El champiñón común, también conocido como Agaricus bisporus, es una de las setas más consumidas en todo el mundo. Procedente de las praderas de Eurasia y Norteamérica, esta seta se presenta en variedades blanca y marrón, y puede añadirse a todo tipo de platos. Los champiñones son una gran fuente de riboflavina, niacina y ácido pantoténico, así como de fósforo y potasio.

Champiñón común (Agaricus bisporus) en polvo

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Maitake

El maitake, o Grifola frondosa, es originario de zonas de Asia, Europa y Norteamérica. Repleto de vitamina D, fibra y una buena cantidad de proteínas, el maitake también se está estudiando por su amplio potencial holístico, al igual que muchas setas de esta lista. Es una seta muy codiciada en la gastronomía, con un delicioso sabor amaderado que deberías probar. O, si prefieres, puedes tomar una cápsula de polvo de maitake para experimentar sus efectos de forma concentrada.

Maitake (Grifola frondosa) ecológico en polvo

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Cola de pavo

Presente en todos los continentes, excepto en la Antártida, la cola de pavo es una seta muy nutritiva que, pese a ser comestible, suele tomarse en forma de suplemento, ya que tiene una textura parecida al cuero que hace que resulte difícil comerla. Con un alto contenido en proteínas y fibra, y pocas calorías, la cola de pavo también es rica en antioxidantes, por lo que los científicos están ansiosos por descubrir su efecto integral para el bienestar. Si quieres probarla, puedes preparar un té usando esta seta en polvo.

Tintura de Hongos Cola de Pavo (Foodsporen)

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Hongo yesquero

También conocido como hongo pata de caballo o Fomes fomentarius, este hongo se encuentra en Norteamérica, Europa, África y Asia, y crece en la corteza de varias especies de árboles. Con su textura dura y leñosa, no se puede comer crudo, sino que debe consumirse en forma de polvo o extracto. Por lo general, se suele preparar un té de hongo yesquero acompañado de vitamina C para mejorar su absorción. Este hongo contiene diversos compuestos únicos, que lo convierten en un ingrediente popular en las dietas para el bienestar.

Hongo yesca (Fomes fomentarius) en polvo

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Reishi

El hongo reishi, o Ganoderma lucidum, es una seta muy apreciada de Asia Oriental. Aunque técnicamente es comestible, su sabor amargo y su parte exterior dura pueden hacer que sea difícil de digerir, por lo que mucha gente opta por secar la seta y tomarla en forma de extracto líquido o polvo. Es una seta con muchos siglos de uso holístico y con gran cantidad de nutrientes, incluyendo proteínas y fibra, por lo que su popularidad no ha hecho más que aumentar en los últimos años.

Extracto de reishi (Ganoderma lucidum)

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Cordyceps

Esta es otra seta con una larga historia de uso en el ámbito del bienestar en Asia Oriental. El género Cordyceps abarca unas 600 especies, y actualmente está siendo investigado por los científicos para conocer sus efectos en la función inmunitaria y otras funciones fisiológicas. Además, contiene vitaminas del grupo B, vitaminas K y E, así como aminoácidos, hidratos de carbono y varios antioxidantes, lo que lo convierte en un complemento muy saludable de la dieta. El cordyceps se suele moler y consumir en forma de té, pero también se puede añadir a diversos platos.

Extracto de cordyceps ecológico (Cordyceps sinensis)

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Shiitake

Muy popular en la alta cocina, el shiitake es una seta muy apreciada por su rico sabor umami y su densidad nutricional. Usado popularmente para sustituir la carne, o como guarnición de platos de carne, el shiitake añade un sabor y una textura increíbles a cualquier comida. Bajo en calorías y rico en vitaminas (como riboflavina, niacina, cobre y vitamina B5) y en nutrientes (fibra y proteínas), este hongo de Asia Oriental es perfecto para añadir a cualquier plato. Pero si prefieres experimentar sus ventajas en forma concentrada, también puedes consumirlo en forma de extracto.

Shiitake (Lentinula edodes) ecológico en polvo

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Setas ostra

Las setas ostra tienen un gran atractivo culinario y actualmente gozan de gran popularidad. Estas setas carnosas crecen en los bosques de zonas templadas y subtropicales del planeta. Con su suave sabor y textura, son adecuadas para prácticamente cualquier tipo de cocina. Además, son una gran fuente de proteínas no animales (más que la mayoría de setas) y muchas vitaminas y minerales. Pueden tomarse en forma de extracto, aunque mucha gente opta por comer estas deliciosas setas enteras.

Grey Oyster - Jeringa de cultivo líquido (fufufungu)

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Chaga

Aunque no suele comerse crudo, el chaga se ha convertido en un elemento imprescindible en la dieta de mucha gente. De sabor amargo, esta seta aporta una gran cantidad de nutrientes al cuerpo, como antioxidantes, fibra, proteínas, hidratos de carbono, ¡y mucho más! El chaga es originario de varias regiones del hemisferio norte y suele crecer formando una masa endurecida en los abedules. A pesar de su aspecto poco apetecible, es una de las setas más apreciadas en la medicina holística.

Extracto de chaga natural (Inonotus obliquus)

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Setas de haya

Las setas de haya son sabrosas y saludables, y mucha gente las incluye en sus platos. Estas setas son originarias de Asia oriental y, como su nombre indica, suelen crecer en las hayas. Con gran cantidad de vitaminas B y D, así como cobre, selenio, potasio y otros minerales, puedes añadirlas a tus platos para darles un sabor a frutos secos, ligeramente dulce, y una textura agradable. Además, las setas de haya contienen altos niveles de antioxidantes.

King Oyster - Jeringa de cultivo líquido (fufufungu)

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¿Cuál es tu seta favorita?

Así que, ¿qué tipo de seta es mejor para ti? En Zamnesia siempre estamos deseando conocer tu opinión. Por suerte, no tienes que escoger solamente una. Prueba todas las variedades de esta lista para hacerte una idea de la increíble diversidad de los hongos comestibles. Tanto si preparas un plato con la seta que elijas como si la tomas en forma de suplemento, podrás disfrutar de numerosas ventajas para la salud. ¡Echa un vistazo a nuestra selección de suplementos de setas para mejorar tu día a día!

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