¿Deberían Considerarse Medicamentos Las Sustancias Psicodélicas?
Las sustancias psicodélicas nos llevan a lugares increíbles y revelan partes de nosotros mismos que a menudo desconocemos. Mucha gente cree que tienen poderes curativos, pero ¿es esa su principal propiedad? En este artículo, vemos si los psicodélicos deberían considerarse medicamentos.
Gran parte del mundo está empezando a entender que las drogas psicodélicas tienen potencial médico. A medida que esta idea evoluciona, esas sustancias son cada vez más populares y los prejuicios que las rodean están empezando a desaparecer.
Pero ¿deberían considerarse principalmente como medicamentos? En este artículo veremos que, aunque los psicodélicos se pueden usar con fines medicinales, su potencial va mucho más allá del de una simple cura, y que si solo pensamos en ellos como medicamentos, estamos simplificando nuestra concepción de lo que realmente significan y de lo que son capaces de hacer.
¿Qué es la medicina?
El término “medicina” puede hacer referencia a una práctica o conjunto de prácticas, o a una sustancia utilizada para tratar enfermedades. A continuación, proporcionamos dos definiciones.
La primera: la medicina es la práctica de tratar una enfermedad o lesión, como por ejemplo, cuando un médico practica la medicina. La RAE define la medicina como: “Conjunto de conocimientos y técnicas aplicados a la predicción, prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades humanas y, en su caso, a la rehabilitación de las secuelas que puedan producir.”
Alternativamente, también puede referirse a una sustancia, a menudo un medicamento, que se utiliza para tratar una enfermedad determinada o para ayudar en la recuperación de una lesión. Según la RAE, un medicamento es una “sustancia que, administrada interior o exteriormente a un organismo animal, sirve para prevenir, curar o aliviar la enfermedad y corregir o reparar las secuelas de esta”.
En su concepto más amplio, la medicina también puede abarcar el mantenimiento de una buena salud y la prevención de enfermedades o lesiones, evitando la necesidad de tratamiento.
La medicina requiere que exista un problema
Independientemente de su definición, la medicina y la práctica medicinal existen necesariamente en relación a enfermedades y lesiones; o en otras palabras, problemas. Incluso la medicina preventiva intenta conservar una buena salud para evitar los problemas antes de que aparezcan.
Según esta afirmación, la medicina solo debe tomarse o practicarse con el fin de curar o prevenir un problema. En ausencia de un problema real o potencial, la medicina no es necesaria y, a veces, es incluso problemática.
¿Qué son las sustancias psicodélicas?
Las sustancias psicodélicas son una categoría de drogas psicotrópicas que producen un conjunto de efectos determinados. El término “psicodélico” proviene de un diálogo entre Aldous Huxley y Humprey Osmond, y fue acuñado más adelante por Osmond en un artículo. Etimológicamente, se compone de dos partes (derivadas del griego antiguo):
- psykhē: “mente”
- dēloun: “revelar” o “hacer visible”
Estas dos palabras se han combinado en el vocablo moderno “psicodélico”, que se traduce aproximadamente como “revelador de la mente”, lo que implica una sustancia que tiene la capacidad de revelar, manifestar o hacer visible la mente de una persona.
Por lo tanto, se puede decir que las sustancias psicodélicas son cualquier droga que sea capaz de ofrecer a una persona una claridad y una perspectiva inusuales de su propio mundo interno. En general, esto se concibe como despojarse del ego (la parte de la mente que crea ideas falsas sobre el yo, y que nos aporta nuestra conciencia de nosotros mismos).
Las dosis altas de psicodélicos pueden causar lo que se conoce como “muerte del ego”, en la que el ego desaparece por completo y una persona pierde su sentido de identidad durante un tiempo. Esto puede traducirse en experiencias desde agradables hasta profundamente incómodas, pero en general, las personas que las tienen las consideran profundas e importantes.
Otra característica habitual de las sustancias psicodélicas es que hacen que las personas experimenten un “viaje”, que es donde se manifiesta la “psicodelia” visual y auditiva. Para muchos, esta es la característica que define principalmente a esas sustancias. Pero, en realidad, lo más extraordinario de estas drogas es la perspectiva que ofrecen a las personas de sí mismas, ya que hay otras sustancias que pueden causar alucinaciones pero no son psicodélicas.
Las sustancias psicodélicas incluyen:
- LSD (ácido)
- Psilocibina (setas alucinógas)
- Mescalina (cactus peyote, San Pedro)
- DMT (ayahuasca)
- Salvia divinorum
- Ketamina (debatible)
- MDMA (debatible)
¿Son los psicodélicos medicamentos?
Entonces, ¿las sustancias psicodélicas son medicamentos?
Sobre todo en las conversaciones modernas, se usa mucho el término “medicina psicodélica”, y muchas personas se refieren a los psicodélicos principalmente, e incluso de forma exclusiva, como un tipo de medicina.
Sin embargo, aunque los psicodélicos sin duda tienen valor medicinal, no deberían considerarse principalmente medicamentos, sino encuadrarse en una categoría propia.
En la siguiente sección veremos por qué.
El valor de la diversión
Lamentablemente, la diversión está infravalorada en muchas culturas modernas. En “The Sociology of Fun” (La sociología de la diversión), Ben Fincham afirma que la diversión es un fenómeno que ocupa una posición paradójica en nuestra sociedad (2017). En general, se considera superflua y poco seria, y se asocia con la pereza, el tiempo libre y la baja productividad. Por otro lado, muchas personas creen que divertirse es uno de los mayores placeres de la vida y que es fundamental para la felicidad. Sin embargo, es un lujo que solamente solemos permitimos cuando hemos superado suficientes dificultades.
Los motivos por los que divertirse está infravalorado hasta el punto de ser considerado irrelevante son múltiples y demasiado complejos para analizarlos aquí. Pero en este artículo vamos a dar por hecho que es algo positivo.
Y según todo lo dicho hasta ahora: los psicodélicos son divertidos (en su mayoría).
Este es el primer motivo por el que deberían considerarse como mucho más que simples medicamentos. Son divertidos. Tener una experiencia psicodélica es emocionante; nos permite percibir el mundo como algo novedoso y especial, y nos ofrece una perspectiva más amplia de nosotros mismos.
Las medicinas no suelen hacer eso, sino que evitan los problemas o nos ayudan a recuperarnos de ellos. Tomar medicamentos no es una experiencia divertida. A la mayoría nos gustaría no tener que tomarlos, y solo lo hacemos cuando queremos curar o tratar algo.
Aunque los psicodélicos se pueden usar de esta manera, muchas personas los consumen incluso cuando están totalmente sanas (no con fines terapéuticos, sino simplemente por diversión).
Los psicodélicos ofrecen mucho más que sanación
Las sustancias psicodélicas tienen un potencial mucho mayor que simplemente curar una enfermedad.
La medicina nos devuelve a un estado “normal” y saludable. La práctica de la medicina tiene como objetivo reponernos y mantenernos en un estado de salud “normal”, o mitigar los efectos negativos de una afección o enfermedad.
La medicina no nos lleva más allá de un estado normal y mesurado. Y eso es exactamente lo que hacen los psicodélicos. Pero además, es el motivo por el que la mayoría de las personas los consumen.
Una persona totalmente sana, feliz y satisfecha con su vida, puede disfrutar y beneficiarse de la experiencia psicodélica. Pero no se puede decir lo mismo de los medicamentos. Tal vez podrían tener un valor preventivo para esa persona, pero no mejorarán su vida de inmediato.
Eso no quiere decir que todas las personas, sanas y felices o no, puedan y deban consumir psicodélicos, sino simplemente que las personas sanas y felices pueden beneficiarse de ellos en gran medida.
Esto tiene relación con el primer punto, en el que incluso las personas más felices y saludables se pueden beneficiar de una experiencia divertida, interesante o novedosa. Pero no se debe a que estas experiencias ofrezcan algún tipo de curación, sino a que mejoran la vida de una persona, independientemente de lo satisfactoria que ya sea.
La medicina busca devolver a una persona a su estado normal y eliminar la negatividad; los psicodélicos pueden llevar a esa persona mucho más allá.
Viajes psicodélicos
La razón por la que los psicodélicos son divertidos y ofrecen un valor que va más allá de la curación, es porque nos hacen alucinar. En este sentido, los viajes psicodélicos incluyen los elementos reveladores del subidón y los cambios perceptivos que se experimentan bajo la influencia de estas drogas.
Tanto si consideras que un viaje es una experiencia mística como si para ti simplemente es un estado cerebral alterado, muy pocas personas que los experimentan (en las condiciones adecuadas) tienen una opinión negativa de los mismos.
Aunque los viajes pueden tener un valor medicinal, reducirlos a una experiencia meramente terapéutica, o considerarlos simplemente como efectos secundarios de un medicamento, es olvidarse de lo importante.
El estado psicodélico es un lugar inusual y especial al que solo unas pocas sustancias nos permiten acceder, y tiene un valor muy profundo en sí mismo.
Los psicodélicos como medicamentos
Dicho todo esto, las sustancias psicodélicas también pueden tener valor medicinal.
Los estudios demuestran que los psicodélicos ofrecen un enorme potencial para ayudar en el tratamiento de todo tipo de afecciones, especialmente de la salud mental, incluida la adicción.
Psicodélicos para la depresión
El tratamiento de la depresión es un área en la que los psicodélicos han demostrado ser muy prometedores. Un estudio realizado en la Universidad Johns Hopkins comprobó que la mayoría de los participantes experimentaron los efectos antidepresivos de la psilocibina incluso 12 meses después del tratamiento (Gukasyan, Davis and Griffiths, 2022). Sin embargo, cabe señalar que este ensayo solo incluyó a 27 personas, por lo que es demasiado pequeño para sacar conclusiones generales. Aun así, en combinación con otras investigaciones, parece que hay una relación consistente.
En lo que respecta a la forma en que los psicodélicos podrían influir en la depresión, las cosas no están muy claras. Existen varias explicaciones. Por ejemplo, los efectos reveladores de la mente que producen estas drogas, especialmente junto a la psicoterapia, pueden ayudar a las personas a identificar y superar viejos patrones, y a enfrentarse a problemas que en general no pueden o no quieren resolver. Y a nivel físico, todavía hay muchos aspectos que se desconocen. Una de las teorías es que las sustancias psicodélicas se unen al receptor 5-hidroxitriptamina 2A (5-HT2AR) y, al hacerlo, aumentan la plasticidad neuronal (Vargas, 2023). Los neurotransmisores, como la serotonina, también se unen a esos receptores, pero no parecen tener el mismo efecto sobre la neuroplasticidad.
Al parecer, lo que tienen de especial estas drogas es que pueden atravesar la membrana celular y acceder a las neuronas, en lugar de simplemente unirse a los receptores. La investigación (referida anteriormente) indica que cuando estos compuestos atraviesan la membrana celular, se produce un aumento de la neuroplasticidad.
Psicodélicos para la adicción
Los psicodélicos también se están estudiando por su posible función en el tratamiento y manejo de la adicción, y de los trastornos por consumo de sustancias (TCS).
No se sabe con certeza cómo pueden ayudar, pero se sospecha que los mecanismos podrían ser parecidos a cómo afectan a la depresión, aumentando la neuroplasticidad. Aparte de esto, también se cree que los cambios en la conectividad de la red cerebral, el procesamiento de las recompensas y las emociones, la conectividad social, la percepción y las experiencias místicas son importantes para ayudar a la gente a modificar sus relaciones con las sustancias adictivas (Rieser, Herdener and Preller, 2022).
Psicodélicos: medicamentos y mucho más
Está claro que los psicodélicos pueden desempeñar un papel importante en la medicina y que, en determinadas circunstancias, podrían actuar como medicamentos. Sin embargo, considerarlos principal o únicamente medicamentos es bastante reduccionista, ya que ofrecen mucho más que el poder de curar.
Los medicamentos tratan o previenen problemas y tienen como objetivo devolver a una persona a un nivel de salud normal. Los psicodélicos también parecen ser capaces de lograr esto en ciertos casos, pero su valor no termina ahí, dado que pueden ayudar a llevarnos más allá de un nivel de salud normal, y a tener experiencias reveladoras y profundas. Por eso, son completamente distintos de los medicamentos, y por lo tanto, deberíamos verlos principalmente como una categoría de sustancias en sí mismos, y después como medicamentos.
- MAXEMILIANO V. VARGAS. (16 Feb 2023). Psychedelics promote neuroplasticity through the activation of intracellular 5-HT2A receptors - https://www.science.org
- Natalie Gukasyan. (Febrero 15, 2022). Efficacy and safety of psilocybin-assisted treatment for major depressive disorder: Prospective 12-month follow-up - https://journals.sagepub.com
- Rieser, Nathalie M., Herdener, Marcus, Preller, & Katrin H. (2021). Psychedelic-Assisted Therapy for Substance Use Disorders and Potential Mechanisms of Action - https://link.springer.com
- 4 min 21 March, 2023 Una Conversación Sobre Psicodélicos Con El Profesor Anil Seth El profesor Anil Seth ha escrito muchos artículos sobre las sustancias psicodélicas, el cerebro y la conciencia. Además de eso, ha escrito un libro, comentado en TED Talks, y trabaja en Dreamachine...
- 6 min 1 August, 2022 Los 5 Psicodélicos Más Potentes Descubre 5 de los psicodélicos más potentes que existen. Con una breve descripción de cada droga y sus efectos, esta lista no es para nada exhaustiva, pero te servirá para hacerte una idea de lo...