Guía Para Liar Un Blunt Perfecto

En la actualidad, hay muchísimas formas innovadoras de fumar cannabis y de colocarse, desde los vaporizadores Volcano hasta bongs de vidrio enormes y tremendamente complicados. Estos inventos son geniales y sin duda eficaces, pero lo métodos antiguos siempre tendrán un toque de nostalgia para nosotros. Liar un blunt es una especie de ritual que proporciona una manera de colocarse estupenda y fiable.

El blunt es una especie de puro de marihuana. Un blunt está formado por la envoltura de un puro del que se ha extraído el tabaco y que se ha vuelvo a llenar con flores de cannabis. A mucha gente le gustan los blunts por el agradable sabor que aporta el puro; los restos de nicotina del tabaco sobrante también le dan un toque especial que es muy apreciado por muchos fumadores. Las envolturas de los blunts se pueden adquirir en una amplia variedad de sabores. Esta opción te ahorra tener que transformar un puro en un blunt.

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En lo que respecta a los blunts y canutos, suele haber dos tipos de fumadores: los que ponen la hierba en un papelilllo y lo lían de prisa y sin ningún cuidado para encenderlo y colocarse cuanto antes; y los que se toman su tiempo para dominar este arte, concentrándose en conseguir una bonita forma que tenga buen aspecto y que se queme de manera uniforme. A continuación, te proporcionamos una guía para liar este último tipo de blunts.

LO QUE NECESITAS

Antes de empezar con los pasos necesarios para liar un blunt, deberás asegurarte de que cuentas con el siguiente equipamiento. Lo primero que vas a necesitar es una variedad de cannabis de tu elección. Cada fumador tiene sus preferencias personales en lo que respecta a la marihuana.

Si quieres relajarte y desconectar, lo mejor es que elijas una variedad rica en genes índica, pero si lo que buscas es un subidón cerebral y un poco de inspiración creativa, tendrás que liar tu blunt con hierba de predominancia sativa. También vas a necesitar una envoltura de puro o blunt para colocar dentro el cannabis. Y por último, un grinder o unas tijeras afiladas para procesar el cogollo.

PASO 1: PREPARAR EL MATERIAL

Para empezar, coloca el cogollo en un grinder de calidad y conviértelo en un fino polvo verde. Esto te permitirá poner más material vegetal en el blunt, ayudará a que arda de forma uniforme, y hará que sea mucho más fácil de liar.

Hay distintos tipos de grinders, pero todos proporcionan más o menos el mismo resultado; aunque algunos son eléctricos y hacen todo el trabajo por ti, mientras otros tienen varios niveles y trituran las flores en un polvo mucho más fino. Algunos grinders vienen con un filtro para recoger los tricomas y acumular kief con el paso del tiempo. Si no tienes un grinder, utiliza unas tijeras afiladas.

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A continuación, tendrás que preparar el envoltorio del blunt. Si lo has comprado ya hecho, el proceso será muy fácil; sólo tienes que sacarlo del envase en el que viene. Si, por el contrario, tienes un puro, abre la capa exterior y vacía el tabaco de dentro; para ello, córtalo longitudinalmente con una cuchilla afilada. Si no dispones de una cuchilla, ábrelo con los dedos aplicando presión a lo largo del puro.

PASO 2: HUMEDECER Y LLENAR LA ENVOLTURA

Humedece ligeramente el blunt para aumentar su flexibilidad. La mayoría de los puros están bastante secos y pueden ser muy quebradizos, sobre todo en manos de un novato. Lo más fácil es humedecer la envoltura con saliva.

O puedes utilizar un dedo mojado en agua. Humedecer la envoltura también ayuda a que esté un poco pegajosa, algo que será necesario para enrollar el blunt cuando esté listo.

Una vez humedecida la envoltura, empieza a llenarla con la hierba procesada, distribuyéndola bien por todo el blunt para que sea más fácil liarlo. A algunos fumadores les gusta poner una boquilla, hecha con un trozo de cartón enrollado, en el extremo del blunt, para que haga las veces de asidero y evite que les entre hierba en la boca.

PASO 3: LIAR EL BLUNT

Una vez que el blunt esté cargado de hierba y un poco húmedo, ha llegado el momento de liarlo. Sujeta la envoltura con los pulgares e índices y empieza a enrollarlo y a darle forma. Cuando la marihuana se haya extendido de forma uniforme, dobla la parte de la envoltura más cercana a ti de manera que su cara externa haga contacto con la interna del lado opuesto. Humedece la parte superior de la envoltura con la lengua y cierra el blunt, pasando los dedos a lo largo de él para alisarlo y que se pegue bien.

PASO 4: CALENTAR EL BLUNT

Antes de encender el blunt, nos queda un último paso. Pasa con cuidado la llama de un mechero a lo largo de la parte sellada; esto ayudará a que el blunt se cierre mejor y minimizará cualquier riesgo de apertura a mitad de sesión; además de eliminar la humedad para que arda de forma uniforme. Una vez que hayas hecho esto, es hora de relajarse, encender el blunt y colocarse.

Luke Sumpter

Licenciado en Ciencias de la Salud, y un apasionado del cultivo de plantas, Luke Sumpter trabaja desde hace 7 años como periodista y escritor profesional en la transversalización de la marihuana y la ciencia.

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