Guía Paso A Paso Para Montar Un Sistema Automatizado De Curado De Cannabis
Si quieres que tu marihuana sepa bien, tienes que curarla. Pero si abrir los frascos todos los días durante seis semanas te parece una lata, tenemos lo que necesitas. Sigue leyendo para aprender a montar un efectivo sistema de curado de cannabis en casa.
El proceso de cultivo de cannabis parece no terminar nunca. Plantas las semillas, cuidas tus plantas mientras crecen, cosechas la hierba, la secas..., ¡y todavía no puedes fumarla! Pero la fase final del curado merece mucho la pena.
En este artículo comparamos el curado manual con el automatizado, y te mostramos un método simple pero efectivo para montar tu propio sistema de curado de cannabis automático en casa.
¿Por qué es importante curar la hierba?
El curado del cannabis es la etapa final del proceso de cultivo. Y aunque en ese momento parezca que la mayor parte del trabajo ya está hecha, es un paso fundamental para que tus cogollos tengan un sabor delicioso. Técnicamente, una vez que la marihuana está seca, se puede fumar o vapear, pero si no haces nada más, tendrás un producto de muy baja calidad que resultará áspero para la garganta y con poco sabor. El curado es un proceso que intensifica los mejores sabores del cannabis, y ayuda a proporcionar caladas suaves y agradables.
Si quieres una hierba suave y con un buen perfil de terpenos, tienes que curarla.
Este proceso puede durar entre dos y seis semanas, dependiendo de lo delicado que quieras que sea el producto final. Como regla general, cuanto más tiempo cures tu marihuana, mejor sabrá. En pocas palabras, el curado consiste en guardar los cogollos secos en un frasco o recipiente hermético, y abrirlo una vez al día para que salga el aire húmedo y viciado de dentro y que entre aire fresco; un proceso conocido como burping. De esta forma, la hierba no acumulará demasiada humedad, se secará lentamente y no correrá tanto riesgo de desarrollar bacterias o moho.
Muchos cultivadores realizan esta tarea a mano, abriendo los frascos de curado una vez al día para que se produzca un intercambio de aire. Pero ¿y si pudieras automatizar este proceso?
Curado de cannabis: manual y automatizado
El proceso de curado de la marihuana se basa en el intercambio de aire y el control de la humedad. En su forma más sencilla, implica abrir y cerrar el frasco una vez al día. Pero al tener que hacerlo durante varias semanas, puede llevar bastante tiempo, por lo que la automatización de este proceso ofrece grandes ventajas.
Curado manual
Como ya hemos comentado, el curado manual implica abrir los frascos una vez al día, esperar un rato, y volver a cerrarlos. No es una tarea pesada, pero requiere que tú o alguien de confianza esté cerca de la hierba a diario, durante un plazo de hasta seis semanas. Si ya has pasado varios meses cultivando y cuidando de tus plantas, es posible que no quieras estar pendiente de tu cannabis mucho más tiempo.
El curado manual es rápido y sencillo, pero puede resultar un poco pesado.
Pros:
- Mayor control del proceso
- Permite una inspección minuciosa de los cogollos
- No se necesitan herramientas adicionales
Contras:
- Requiere de mucho tiempo
- Exige atención diaria
- Conlleva un mayor riesgo de cometer errores
Curado automatizado
En cambio, si construyes tu propio sistema de curado automatizado, podrás delegar ese proceso y no tendrás que estar presente todo el rato. Esto te ahorrará una cantidad importante de tiempo y permitirá que el curado se lleve a cabo por sí solo. Pero si algo sale mal, es posible que no te des cuenta a tiempo de salvar sus cogollos. Además, montarlo puede llevar bastante tiempo y ser caro, por lo que no es adecuado para todos los cultivadores.
Pros:
- Ahorra tiempo y reduce la cantidad de trabajo
- Ofrece un control constante y preciso del medio ambiente
- Reduce el riesgo de cometer errores
Contras:
- Coste inicial elevado
- Se necesitan conocimientos técnicos
- Pueden producirse fallos mecánicos
Cómo construir un sistema automatizado de curado de cannabis
Si quieres montar tu propio sistema de curado automatizado, puedes hacerlo de una manera muy sencilla. Lo único que necesitas son los materiales adecuados. A continuación te mostramos un método simple pero efectivo.
Materiales
- Cubo de 10-20 litros: Preferiblemente sin BPA, y asegúrate de que tenga una tapa con cierre hermético
- Bomba de aire motorizada y temporizador digital: Para la circulación y el control del aire
- Válvulas de retención: Para evitar el reflujo
- Tubo de silicona (de 3mm): Para conectar los componentes
- Colector: Para distribuir el aire de la bomba
- Tubo de PVC (de 16mm): Para el conducto principal del aire
- Abrazadera de manguera de acero inoxidable (de 13mm a 32mm): Para fijar las conexiones
- Packs de control de humedad: Para mantener una humedad óptima
- Imperdible: Para hacer orificios de ventilación en el tubo
- Taladro con broca de 2,8mm
Boveda Humidipak
Instrucciones
- Para empezar, taladra dos agujeros en cada cubo: uno cerca de la parte superior y otro cerca de la base. Estos orificios deberán ser de 2,8mm para que creen un sellado hermético alrededor del tubo de 3mm cuando lo insertes.
- Inserta el tubo de admisión en el orificio inferior que has perforado. Más adelante lo tendrás que conectar al colector.
- Corta 15cm del tubo de 3mm para usarlo como conducto de salida. Insértalo en el orificio superior.
- Conecta las válvulas de retención a los extremos de los tubos que están dentro del cubo, y asegúrate de que la dirección del flujo de aire sea la adecuada. Conecta el lado grande de la válvula al tubo inferior, y el pequeño al tubo superior.
- Ahora corta 1 metro del tubo de 3mm y perfóralo cada 2,5-4cm con el imperdible.
- Conecta este tubo perforado a la válvula de retención del fondo del cubo, asegurándolo con un nudo bien apretado.
- Enrolla los tubos alrededor de la base del cubo en forma de círculo para que se produzca una distribución uniforme del aire.
- Conecta el tubo de admisión al colector, y luego abre la válvula.
- Conecta el colector a la bomba de aire y fija todas las conexiones con la abrazadera de manguera.
- Haz una prueba para asegurarte de que no se escape el aire y que la válvula funcione correctamente. Fíjate si el conducto de escape produce un silbido, ya que esto indicará una presurización correcta.
- Cuando esté listo, llena el cubo con hierba hasta la mitad.
- Pon dentro un pack de control de humedad (58-62% de HR).
- Continúa llenando el cubo con cannabis hasta arriba y pon otro pack de control de humedad encima.
- Por último, cierra bien la tapa, enciende la bomba y programa el temporizador para que active el sistema durante 5 minutos cada 24 horas. Este ciclo mantendrá una HR y un intercambio de gases óptimos.
Consejos y sugerencias para construir un sistema automatizado de curado de cannabis
Para perfeccionar aún más el proceso de curado automatizado, ten en cuenta los siguientes consejos y trucos:
- Adapta el proceso a tu variedad: Cada variedad produce unos cogollos con una estructura física, densidad, contenido fitoquímico, etc. únicos, lo que podría afectar al tiempo que debes curarlos. Los cogollos esponjosos, por ejemplo, se secan antes, mientras que los que son más densos requieren más tiempo. En internet hay muchos recursos para ayudarte a sacar el máximo partido a las variedades que elijas.
- Modifica nuestras instrucciones: Es posible que encuentres una forma más adecuada de crear un sistema automatizado de curado de cannabis, o un elemento adicional que te guste más. No dudes en experimentar para mejorar tu sistema, y si se te ocurre algo que funciona mejor, ¡compártelo con la comunidad cannábica!
- Revisa el sistema con frecuencia: Los sistemas automatizados pueden fallar y, para evitar que ocurra un desastre, deberás solucionar el problema con rapidez. Así que, revisa todo al menos un par de veces a la semana.
¿Cuál es el mejor proceso para curar marihuana?
En última instancia, el mejor proceso de curación de cannabis dependerá de tus necesidades y recursos. El curado manual ofrece un mayor control y la capacidad de inspeccionar cada cogollo de cerca, por lo que es ideal para tandas de hierba pequeñas o para consumo personal. Sin embargo, para cultivos grandes o personas que quieren ahorrarse tiempo y trabajo, los sistemas de curado automatizado ofrecen una mayor consistencia y eficiencia. Independientemente del método que elijas, un curado adecuado es fundamental para conseguir cannabis de calidad, suave, delicioso y potente.
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