Historias Reales De Crímenes Relacionados Con Drogas: Marihuana

Para algunas personas, la marihuana es excelente para relajarse, y para otras tiene efectos terapéuticos. El cannabis es una planta ancestral que lleva miles de años acompañando a los humanos de todo el planeta. Sin embargo, sigue estando prohibida o muy controlada en muchos países, y al ser ilegal, su comercio y consumo a veces están relacionados con crímenes horribles.

Desde capos millonarios hasta asesinos en serie, en esta edición de Historias reales de crímenes relacionados con las drogas revelamos algunos de los episodios más siniestros relacionados con el cannabis. Sigue leyendo para saber más sobre el lado oscuro de la marihuana.

El asesino de los sueños (The Dream Slayer)

Antes de que se aprobara la “Marihuana Tax Act” (una ley sobre la marihuana en EE.UU.) en el año 1937, se estrenó “Reefer Madness”, que ahora se considera una película clásica de culto. Pero antes de eso, tuvo lugar la historia del Asesino de los sueños de Tampa (Tampa Dream Slayer), también conocido como Victor Licata. El 16 de octubre de 1933, Licata mató a hachazos a sus padres y a sus tres hermanos tras soñar que le ataban a una pared y se burlaban de él mientras le cortaban los brazos y los sustituían con troncos de madera y garras de acero. La policía y la prensa no tardaron en culpar a la marihuana y el aguardiente casero del salvaje crimen cometido por Licata. Y eso fue todo lo que necesitó el jefe de la DEA (Administración de Control de Drogas), Henry Anslinger, para avivar su campaña contra el cannabis, lo que finalmente llevó a la prohibición de esta sustancia con la “Marihuana Tax Act”.

Sin embargo, el cannabis no tuvo nada que ver con este macabro asesinato. Licata tenía fama de ser peligroso e inestable, y aunque un año antes la policía trató de que lo ingresaran por problemas de salud mental, su familia se negó. Su padre, consciente de la inestabilidad del hijo, dormía con una pistola debajo de la almohada. Cuando salió a la luz la información sobre su desequilibrio mental, Licata fue condenado a pasar el resto de su vida en un centro psiquiátrico. Pero su apodo (The Dream Slayer) perdura en el tiempo, así como la prohibición de la marihuana en Estados Unidos.

El fumeta asesino

El 25 de abril de 2022, Joshua Jacques llamó a su madre diciendo que iba a realizar un sacrificio, y esa misma noche apuñaló a su novia y a tres miembros de su familia hasta matarlos. Cuando la policía lo encontró, Jacques estaba desnudo en el cuarto de baño, rezando y gritando “Alá, llévame ahora”, “Mátame ya” y “Por favor, Dios, perdóname”. Más tarde, en un hospital de la zona, volvió a afirmar que lo que había hecho era “un sacrificio”.

Joshua tenía un largo historial de consumo de drogas, una conducta delictiva y problemas de salud mental. Había admitido que consumía 2 g de marihuana al día, y algunos informes indican que en el periodo previo a los asesinatos consumió hasta 3 g diarios, además de beber alcohol. La justicia declaró a Jacques culpable de los cuatro homicidios y lo condenó a 46 años de cárcel. Los expertos opinaron que probablemente sufrió un episodio maníaco o una psicosis temporal, a causa del consumo de drogas y alcohol.

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El policía engañoso

Cuando Jari Aarnio inició su carrera en el departamento de policía de Helsinki en 1979, parecía tener un futuro muy prometedor. Durante sus primeros 7 años como policía, Aarnio ayudó a detener al famoso capo de la droga Miika Kortekallio, un acto que le hizo ganar el premio al policía del año en 1987. En la cumbre de su carrera, Aarnio era el jefe de la brigada antidroga de Helsinki.

Sin embargo, en diciembre de 2016, la carrera de Aarnio dio un giro radical: el jefe de policía fue acusado de tráfico de drogas y corrupción. Aarnio estuvo encarcelado hasta junio de 2022 por ayudar a una banda criminal a introducir ilegalmente unos 800 kilos de hachís en el país, así como por interferir y pervertir la investigación del contrabando y amenazar a un sospechoso. Aarnio también fue condenado por fraude y corrupción, dado que era accionista de una empresa que vendía material de vigilancia al departamento de policía de Helsinki, al servicio de aduanas finlandés, a la Oficina Nacional de Investigación y al Ministerio de Asuntos Exteriores.

El “reverendo” del hachís

Klaas Bruinsma es uno de los personajes más conocidos de la mafia holandesa. Aunque era el hijo del fundador de Raak (una famosa marca de refrescos de Holanda), Klaas eligió llevar una vida muy distinta, basada en la delincuencia. Tomó esta decisión con tan solo 16 años, cuando dejó los estudios para dedicarse a vender hachís, y enseguida se ganó el apodo de “el reverendo”, porque siempre vestía de negro y le gustaba dar sermones.

Junto con Thea Moear (otro conocido personaje del mundo del crimen holandés), Klaas montó un gran imperio de la droga a nivel internacional en un tiempo aparentemente récord. A finales de la década de los 70, Klaas introducía con frecuencia en Europa 5000 kg de hachís procedentes de Pakistán, Líbano y Siria. En la cumbre de su carrera, sus cargamentos alcanzaron un valor de unos 200 millones de euros. Se cree que para los años 80, la banda generaba cerca de 225.000 € al día. Sin embargo, el negocio de Klaas acabó desmoronándose después de que el periodista Bart Middelburg lo desenmascaró en el periódico holandés Het Parool. Poco después de la publicación del artículo, la policía incautó lo que iba a ser el último cargamento de hachís de Klaas. Klaas empezó a consumir cocaína y su actividad fue decayendo poco a poco. En 1991 fue tiroteado frente al hotel Hilton de Ámsterdam por un miembro de otra banda de crimen organizado.

El primer capo de la droga ejecutado en EE.UU.

En 1988, el gobierno de Estados Unidos reintrodujo la pena de muerte conforme a la Ley contra el consumo de drogas (Anti-Drug Abuse Act). Y en 1992, Juan Raúl Garza, un capo de la droga en Brownsville, Texas, fue el primer hombre condenado a muerte por el gobierno estadounidense desde 1963. Hijo de inmigrantes mexicanos, Garza creó una red de narcotráfico muy rentable a finales de los años 80 y principios de los 90, que introducía miles de kilos de marihuana en Estados Unidos, por tierra y por aire.

Cuando sus envíos empezaron a ser interceptados por la policía, Garza sospechó de algunos de sus hombres. Esto culminó en tres asesinatos: dos ordenados por Garza y ejecutados por sus secuaces, y uno ejecutado por el propio Garza. Estos asesinatos, junto con su rol de líder de una red clandestina de narcotráfico, fueron el motivo de su condena a muerte en virtud de la Ley contra el consumo de drogas de 1988. Garza fue declarado culpable en 1993 y, a pesar de que hubo cierta oposición a su condena (que afirmaba que estaba basada en motivos raciales), fue ejecutado mediante inyección letal el 19 de junio de 2001.

Delitos relacionados con el cannabis: La otra cara de la moneda

La planta de marihuana consumida con fines medicinales, espirituales e incluso industriales, ha desempeñado un papel fundamental en el desarrollo de las sociedades humanas en todo el mundo. Sin embargo, también ha estado relacionada con varios crímenes. En este artículo hemos mostrado algunas de las atrocidades que han tenido lugar en un mundo clandestino que, debido a la ilegalización, sigue siendo el principal escenario de la producción y el comercio de cannabis. Así que, ¿qué mejor incentivo para legalizar esta planta ancestral y llevar su cultivo, comercio y consumo a un ámbito regulado y lícito?

Steven Voser

Steven Voser es un periodista independiente con más de 6 años de experiencia en la redacción de artículos sobre todo lo relacionado con la marihuana; cómo cultivarla, los mejores métodos de consumo, el sector cannábico en expansión y el oscuro panorama legal que lo rodea.

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