Los Cannabinoides No Son Exclusivos Del Cannabis
Si creías que los cannabinoides eran exclusivos del cannabis, ¡piénsalo mejor! Hay muchas especies de plantas que contienen cannabinoides, terpenos y cannabimiméticos. A medida que crece el número y el alcance de los tratamientos a base de cannabinoides, es vital saber dónde podemos encontrar fuentes alternativas. Sigue leyendo para saber más.
El cannabis permanece en primera línea de los tratamientos basados en cannabinoides, debido a su abundante contenido de estos compuestos únicos. Los cannabinoides interactúan con el sistema endocannabinoide de nuestro cuerpo para producir una amplia gama de efectos. El colocón asociado al THC, que derrite la mente y estimula el apetito, o las propiedades calmantes y terapéuticas del CBD son solo dos ejemplos. De hecho, existen más de cien cannabinoides diferentes y, aunque solo conozcamos el funcionamiento de algunos de ellos, cada uno parece tener capacidades únicas.
LOS CANNABINOIDES NO SOLO SE ENCUENTRAN EN EL CANNABIS
Afortunadamente, hay varias otras plantas y sustancias que no solo contienen cannabinoides, sino también otros compuestos que actúan del mismo modo que los cannabinoides y, como resultado, interactúan con nuestro sistema endocannabinoide. Puede que te sorprenda saber que puedes encontrar estos compuestos en el armario de la cocina, o creciendo de forma natural en tu jardín. Las fuentes alternativas de cannabinoides tienen una importancia considerable. Los cannabinoides no solo están empezando a ser parte habitual de algunos programas de tratamiento específicos, sino que además podrían ayudar a combatir el fenómeno de la deficiencia endocannabinoide clínica (CECD).
LA IMPORTANCIA DE LAS FUENTES ALTERNATIVAS DE CANNABINOIDES
Aunque el cannabis contiene la mayor concentración de cannabinoides, especialmente en comparación con otras plantas, no es la planta más fácil de conseguir. Las opiniones en torno a la marihuana siguen divididas pero, en general, su cultivo y cosecha sigue siendo ilegal en la mayor parte del mundo moderno. La ilegalidad del cannabis también dificulta el desarrollo de estudios basados en cannabinoides, lo que supone un gran obstáculo para el avance de los tratamientos basados en estos compuestos.
Los estudios sobre cannabinoides tienen una importancia doble. En primer lugar, los cannabinoides se consideran una nueva opción de tratamiento para el cáncer, el Parkinson, la enfermedad de Crohn, el síndrome del colon irritable, la artritis y la depresión, entre otros.
Muchos de estos tratamientos producen menos efectos secundarios graves que los tratamientos a base de fármacos, por lo que el interés por adoptar un enfoque natural está aumentando.
En segundo lugar, existe la creencia de que muchas afecciones crónicas podrían estar relacionadas con una deficiencia en la capacidad del cuerpo de producir endocannabinoides. Si se demuestra esta afirmación, la deficiencia endocannabinoide clínica podría combatirse mediante suplementos de cannabinoides externos. Los fitocannabinoides presentes en la marihuana y otras plantas son candidatos ideales para esta medida.
TODAS ESTAS PLANTAS ESTIMULAN EL SISTEMA ENDOCANNABINOIDE
Algunas de estas plantas o sustancias pueden ser más difíciles de conseguir que otras, pero la mayoría son legales. Todas contienen compuestos que pueden interactuar con el sistema endocannabinoide, de un modo u otro.
EN EL ARMARIO DE LA COCINA
Chocolate (Theobroma cacao)
¿Cuántas veces recurres al chocolate cuando tienes un día duro en el trabajo? Resulta que el efecto calmante y tranquilizante del chocolate (concretamente el chocolate negro) no es un viejo mito. Un estudio realizado en 1996 indicaba que el chocolate “podría contener lípidos relacionados química y farmacológicamente con la anandamida”. La anandamida es un endocannabinoide comúnmente conocido como “molécula de la felicidad”, ya que estimula el estado de ánimo de forma natural. También hay evidencias que respaldan la idea de que otros compuestos del cacao interactúan con la enzima FAAH.
El cuerpo produce ácido graso amida hidrolasa (FAAH) para contrarrestar la acumulación de anandamida. Al bloquear la producción del FAAH, y por tanto limitando la degradación de la anandamida, podemos disfrutar del colocón natural producido por el chocolate.
Pimienta negra (Piper nigrum)
Si sigues buscando en el armario de la cocina, encontrarás otra sustancia que puede interactuar con el sistema endocannabinoide. Técnicamente la pimienta negra no contiene cannabinoides, pero sí contiene el terpeno beta-cariofileno (BCP). Los terpenos son los compuestos que aportan el aroma al cannabis y a muchas otras plantas. Se ha descubierto que los terpenos también tienen sus propios beneficios terapéuticos.
Por ejemplo, el beta-cariofileno tiene potencial como antiinflamatorio, a través de su unión con los receptores CB2. Otros terpenos, como el mirceno, también muestran capacidad de producir efectos sedantes, en estudios con ratas.
EN EL JARDÍN
Equinácea (Echinacea)
La equinácea suele cultivarse por sus atractivas flores y se encuentra comúnmente en jardines, parterres de flores y balcones. Pero si observamos la flor bajo el microscopio, la planta muestra una serie de capacidades totalmente diferentes - las flores de equinácea contienen unos compuestos llamados cannabimiméticos.
A nivel molecular, los cannabimiméticos son diferentes a los cannabinoides, pero provocan una reacción similar en nuestro sistema endocannabinoide. La equinácea se ha usado durante siglos como remedio para el resfriado común y la fatiga. Se cree que parte de su eficacia reside en cómo ayuda a regular nuestro sistema inmunológico e inflamatorio.
EN LA NATURALEZA
Hepática (Radula marginata)
La radula es una planta única, porque su consumo produce efectos similares al THC (pero mucho más suaves). Sin embargo, estos efectos no se producen como resultado del THC, sino de un compuesto similar llamado perrottetineno. Se cree que el perrottetineno se une a los receptores CB1 del mismo modo que el THC, pero la hepática tiene una clara ventaja: es legal, al menos de momento.
Flor eléctrica (Acmella oleracea)
Todos hemos sufrido dolor de muelas en algún momento. Antes de la llegada de la medicina moderna, la gente tenía que recurrir a métodos holísticos para aliviar el dolor. La flor eléctrica era apreciada por la sensación de adormecimiento producida al mascar sus hojas.
La Universidad de Cambridge ha estudiado la planta y ha descubierto que contiene un compuesto llamado N-isobutilamida. Se cree que este compuesto se une a los receptores CB2 para ayudar a regular el dolor y la inflamación. Se espera poder aprovechar las capacidades de la flor eléctrica para ofrecer una alternativa natural a los analgésicos sintéticos.
TAMBIÉN EXISTEN OTRAS PLANTAS
Las plantas mencionadas son solo un fragmento de las especies que contienen cannabinoides o compuestos similares. A medida que aumenta nuestro conocimiento sobre los cannabinoides, también aumenta la importancia de tener fuentes alternativas. Si tenemos en cuenta que algunas de estas plantas contienen compuestos que actúan del mismo modo que los cannabinoides, entender cómo funcionan y dónde pueden encontrarse es fundamental para el futuro de los tratamientos a base de cannabinoides. Si podemos imitar y aprovechar las capacidades de los cannabimiméticos, ¡quién sabe qué posibles remedios nos esperan en el futuro!
- (n.d.). - https://www.sacredchocolate.com
- (n.d.). Beta-caryophyllene is a dietary cannabinoid | PNAS - https://www.pnas.org
- (n.d.). - https://www.cam.ac.uk
- do Vale TG, Furtado EC, Santos JG, & Viana GS. (2002 Dec). Central effects of citral, myrcene and limonene, constituents of essential oil chemotypes from Lippia alba (Mill.) n.e. Brown. - PubMed - NCBI - https://www.ncbi.nlm.nih.gov