Cómo Diferenciar La Buena Hierba De La Mala
Acabas de llegar a casa tras un largo día de trabajo. Necesitas sentarte y relajarte un rato. Sin embargo, no te fijaste mucho cuando pillaste esa bolsa de cogollos: ¡es horrible! Pero no te preocupes, no volverás a cometer el mismo error. A continuación, aprenderás a identificar la mejor hierba incluso antes de sentarte a fumarla.
¿Qué separa la hierba buena de la mala? Pues depende. Algunos fumadores pueden encontrarse con cannabis realmente increíble y no gustarles en función de sus preferencias personales en cuanto a aroma y efectos. Sin embargo, ¡esto no significa que no sea buena marihuana!
La hierba realmente mala no tiene cristales y se nota demasiado húmeda o seca. También suele tener un sabor desagradable y dejar una sensación áspera en la garganta. En cambio, la buena marihuana sabe estupendamente, es pegajosa y tiene mucha resina. Sigue leyendo para saber más sobre lo que diferencia a la hierba buena de la mala.
¿Qué hace que la marihuana sea buena o mala?
Los factores que hacen que la hierba sea buena o mala pueden variar de una persona a otra. Algunos consumidores prefieren cogollos ricos en THC con terpenos dulces, por ejemplo, mientras que otros prefieren más CBD y sabores terrosos.
Independientemente de las diferencias de sabor y efectos, la mayoría de los consumidores de cannabis coinciden en una serie de variables objetivas que distinguen las flores de cannabis buenas de las malas. Normalmente, los buenos cogollos son densos, tienen un aroma y un sabor potentes y presentan una generosa capa de cristales (conocidos botánicamente como tricomas).
Las flores de buena calidad también se han curado correctamente para potenciar su sabor, no tienen moho y no son esponjosas, excesivamente secas o húmedas, ni están repletas de semillas y tallos. Hay varios factores que pueden influir en que la hierba salga buena o mala, como la habilidad del cultivador y la calidad de la genética que decida cultivar.
Cómo diferenciar la buena marihuana de la mala
Hay múltiples formas de determinar la calidad de las flores de cannabis. Por supuesto, fumar/vapear es la mejor forma de probar sus sabores y efectos. Sin embargo, esta acción suele ocurrir después de comprar tu hierba. Antes de entregar el dinero, y teniendo en cuenta que estás tratando con un vendedor razonable, también te puedes fijar en otras señales importantes, como el aspecto, el olor y el tacto. A continuación encontrarás más información al respecto.
Aroma
Varios grupos de compuestos contribuyen al aroma de las flores de la hierba. Entre ellos se encuentran los terpenos, responsables de una gran variedad de olores, como los de la fruta, las flores, la pimienta y el pino. Los compuestos volátiles de azufre, en cambio, impregnan algunas variedades con olores a skunk.
Los aromas de los buenos cogollos de cannabis serán variados, pero deben resultar atractivos y fuertes. Por el contrario, los cogollos mal secados y curados suelen oler a hierba y moho.
Cristales
Si alguna vez has observado de cerca un cogollo de hierba, sabrás exactamente a qué nos referimos cuando hablamos de cristales. Estas diminutas estructuras se llaman tricomas, y producen los terpenos y cannabinoides que determinan el sabor y el efecto de cada variedad.
La densidad de tricomas en la superficie de un cogollo indica su calidad. ¿Por qué? Porque cuantos más tricomas haya, más terpenos y cannabinoides tendrá el cogollo. Esto suele traducirse en efectos más intensos y aromas y sabores más potentes.
Pero la densidad de tricomas por sí sola no indica necesariamente la calidad. Los cultivadores experimentados intentan cosechar basándose en el color de los tricomas. Los tricomas completamente transparentes aún no han madurado, y las flores con tricomas ámbar se han cosechado demasiado tarde. Lo ideal es que tus cogollos tengan tricomas blanquecinos y opacos. Puedes comprobarlo con un microscopio de bolsillo económico. Tómate tu tiempo para estudiar esos preciosos tricomas.
Húmeda vs seca
Al inspeccionar las flores de cannabis, deben percibirse pegajosas y duras en lugar de húmedas o quebradizas y secas. Aprieta un poco los cogollos y asegúrate de que recuperan su forma. El cannabis húmedo es desagradable al fumarlo, huele a rancio y puede esconder moho. La hierba demasiado seca también resulta áspera para la garganta cuando se fuma. Además, carece de cannabinoides y terpenos, ya que muchos de estos compuestos volátiles se degradan cuando los cultivadores secan la marihuana demasiado rápido o durante demasiado tiempo.
Muchas hojas
Botánicamente hablando, los cogollos no son flores, sino racimos de flores pistiladas. Estas estructuras forman la inflorescencia del cannabis, que también incluye tallos y pequeñas hojas conocidas como hojas de azúcar. Los cogollos de buena calidad casi siempre llegan al mercado manicurados, lo que significa que los cultivadores se han tomado la molestia de eliminar la mayor parte de las hojas de azúcar antes o después del secado.
Las hojas de azúcar forman una capa alrededor de las flores secas. Si no se quitan, sirven de hábitat para la formación de moho. Además, estas estructuras contienen menos tricomas que el tejido de las flores pistiladas. Esto significa que, al peso, recibes menos por tu dinero cuando compras cogollos con hojas. Además, asegúrate de que no te quedas con el fondo de la bolsa. Busca cogollos enteros, no migajas, y comprueba si contienen tallos y semillas, así como moho.
Color de los estigmas
Además de detectar tricomas, también notarás pequeñas estructuras parecidas a pelos cuando observes de cerca los cogollos de marihuana. Se conocen como estigmas, y cada flor pistilada posee dos de estos zarcillos protuberantes. Se asoman al aire libre durante la fase de floración, colocados para recibir el polen de una planta macho.
Lo ideal es que nunca entren en contacto con el polen, ya que esto provocaría que la planta femenina empezara a producir semillas. Los estigmas suelen ser blancos al principio de la floración y se vuelven naranjas o rojos al final de la misma. Los estigmas blancos indican que los cogollos no están maduros. Cuando busques hierba de buena calidad, deberías ver pelos más oscuros, que incluso pueden parecer rojos o morados en algunos casos.
Cuanto más pegajosa, mejor
Las flores de cannabis son pegajosas debido a la resina que segregan sus tricomas. Esta sustancia viscosa se forma en los cogollos cuando los tricomas se rompen y liberan su contenido. Estas sustancias químicas ayudan a la planta a defenderse de las plagas e incluso de los rayos UV del sol. Desde el punto de vista de los fumetas, cuanto más pegajosos son los cogollos, más cannabinoides y terpenos contienen.
Los cogollos de calidad deberían ser pegajosos al tacto. Sin embargo, hay que saber diferenciar entre pegajosidad y humedad. Presiona ligeramente un cogollo entre el pulgar y el índice; después deberías ver y sentir resina en las puntas de los dedos, como si los hubieras mojado en miel.
La prueba de fumar/vapear
Después de cumplir todos los criterios mencionados anteriormente, puedes tener la certeza de que estás a punto de invertir en un buen cannabis. Si tienes suerte, puede que tu vendedor te deje dar una calada de prueba. Sin embargo, normalmente se fuma y se vapea después de la transacción.
Entonces, ¿en qué debes fijarte cuando le des una calada? En primer lugar, debes analizar el sabor. El humo (o vapor) debe resultar relativamente suave para la garganta y los pulmones. También deberías apreciar los sabores que promete el vendedor, ya sean afrutados, terrosos o skunk. Cualquier sabor a paja, hierba cortada o moho es un indicador de hierba mal secada y curada.
Poco después de probarla, empezarás a sentir el efecto. De nuevo, esta experiencia variará drásticamente dependiendo del contenido fitoquímico de la cepa en cuestión. Una variedad con alto contenido de THC te colocará rápidamente, mientras que una con alto contenido de CBD tendrá un efecto de lucidez y relajación.
Compra solo la mejor marihuana
Ahí lo tienes: ya sabes exactamente qué buscar para asegurarte de comprar buena hierba. Las flores de cannabis de calidad tienen un fuerte olor y son pegajosas, poseen muchos tricomas blanquecinos y pelos oscuros, y deben tener un sabor agradable y producir un humo o vapor suave.
Por el contrario, la hierba mala huele a paja, se siente demasiado húmeda o seca en las manos y deja una sensación áspera en la garganta y los pulmones. Utiliza estos nuevos conocimientos para comprar la mejor marihuana que puedas conseguir.
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