¿Qué Es La Ibogaína?

El iboga, o más concretamente su alcaloide ibogaína, es una potente sustancia alucinógena capaz de producir un efecto extraño y esclarecedor. Muy poco conocida fuera del movimiento bwiti de África central, se trata de una raíz mística con posibles propiedades holísticas, y tiene unas estadísticas bastante aterradoras.

¿Qué es la ibogaína?

La ibogaína es una sustancia de la que seguramente no hayas oído hablar. Se trata de un alcaloide que está presente en grandes cantidades en las raíces de la planta iboga (Tabernanthe iboga), y es una droga psicodélica extraña pero fuerte, con unos efectos que pueden durar semanas.

El arbusto iboga es originario de África central, crece en países como Gabón y Camerún, y está vinculado a la cultura bwiti. Se consume en prácticas tradicionales, rituales y culturales, y algunas personas lo consideran una planta mística con propiedades curativas desde el punto de vista espiritual.

El consumo de iboga se remonta a las tribus pigmeas de África central de finales del siglo XIX, cuando el pueblo bantú huyó de los misioneros cristianos franceses que intentaban acabar con sus prácticas tribales. Los pigmeos compartieron los secretos del iboga con los bantúes, y de la combinación del uso pigmeo del iboga, la cultura bantú y las creencias cristianas, nació el movimiento bwiti. Para los bwiti, el arbusto iboga es una parte fundamental de sus costumbres cristianas, ya que creen que los acerca más a Dios y a Jesucristo.

Diferencia Entre Iboga E Ibogaína

El iboga es un arbusto, pero cuando la gente habla de esta planta como una droga, se refieren concretamente a la corteza de su raíz, que es donde se encuentran las concentraciones más altas de ibogaína. Pero también contiene otros 11 alcaloides, como, por ejemplo, la tabernantina, y muchas personas creen que esto también influye en los efectos del iboga.

Sin embargo, la ibogaína está considerada como el alcaloide más importante de la planta, y es posible que sea su único ingrediente activo. La ibogaína por sí sola produce una experiencia psicodélica de larga duración. Algunos profesionales de la medicina han identificado la ibogaína como el alcaloide responsable de los potenciales efectos holísticos del iboga.

Dicho esto, existen diferencias importantes entre una experiencia con iboga y una experiencia con ibogaína. Aunque la siguiente comparación podría ser un poco exagerada, se parecen un poco a la diferencia que hay entre fumar DMT en extractos y tomar un brebaje de ayahuasca. Por un lado, tanto la ayahuasca como el iboga provocan vómitos y “purgan” el organismo, mientras que la ibogaína y la DMT por sí solas no suelen tener este efecto.

¿Cómo funciona la ibogaína?

El cuerpo convierte la ibogaína en noribogaína, que interactúa con numerosos receptores, pero principalmente con los sigma-2. También presenta cierta afinidad por los receptores opioides y de serotonina.

El subidón de ibogaína es complejo y tiene distintos efectos en función de la dosis. En dosis bajas, causa estimulación y una mayor sensibilidad a la luz y el sonido. En dosis altas, produce un efecto oneirogénico, lo que significa que produce alucinaciones parecidas a los sueños durante la vigilia.

Sabemos que la ibogaína tiene una interacción nociva (e incluso fatal) con muchas sustancias, entre las que se incluyen numerosos medicamentos, pero también algunos alimentos. Por lo tanto, es importante abstenerse de tomar muchos alimentos, o ayunar por completo, durante las 24 horas anteriores al consumo de esta sustancia.

La experiencia con ibogaína se divide en tres fases:

Fase 1

Esta fase comienza alrededor de 1-3 horas tras la ingesta de iboga o ibogaína, y es la parte principal del “viaje”. Dura de 4 a 8 horas. A menudo produce sueños panorámicos con paisajes visuales, y guía al consumidor a través de sus recuerdos. El iboga induce un efecto psicodélico más fuerte que la ibogaína aislada.

En esta fase es cuando la ataxia se produce con mayor frecuencia. Los consumidores pierden parte del control sobre sus músculos, por lo que es importante estar en un lugar cómodo en el que nadie te moleste. Ir al baño puede ser complicado, así que estate preparado/a.

Fase 2

Viene inmediatamente después de la primera fase y puede durar entre 8 y 20 horas. En esta etapa, los consumidores reflexionan sobre lo que han experimentado durante la primera parte del viaje, a menudo con una actitud neutral y valorativa. Las alucinaciones van desapareciendo. También se prefiere la oscuridad y el silencio, ya que los estímulos externos pueden resultar molestos y frustrantes.

Fase 3

Las cosas empiezan a volver a la normalidad. Sin embargo, se pueden experimentar pensamientos y sentimientos valorativos residuales hasta 72 horas después de tomar ibogaína, y, potencialmente, varias semanas después de la ingesta de iboga.

Consumo de ibogaína

Tradicionalmente, el iboga se consume en forma de corteza de raíz cruda; a veces, durante varios días. Aunque lo normal es tomar dosis pequeñas, las dosis altas se reservan para ciertos acontecimientos, como las ceremonias en las que se celebra la mayoría de edad, o para combatir un trauma grave. A menudo se consume como droga comunal.

La exploración de la ibogaína

Desde su descubrimiento original en África, la ibogaína ha tenido una larga tradición como parte de muchas ceremonias religiosas indígenas. Dado su gran contenido en alcaloides, no es de extrañar que se use en este tipo de entornos, ya que puede provocar fuertes reacciones alucinógenas y psicodélicas en el consumidor. Aunque sus orígenes se basan en estos usos tradicionales y ceremoniales, la ibogaína no está muy presente en el mundo actual. Pero esto no significa que no haya nada que aprender de la ibogaína. Incluso se han realizado ensayos para utilizarla como un medio para frenar las adicciones. Sin embargo, estas investigaciones aún están en fases iniciales y se necesitan más estudios para poder comprender exactamente el papel de la ibogaína en la vida moderna.

Luke Sholl

Luke Sholl lleva escribiendo sobre la marihuana, el potencial de los cannabinoides para el bienestar y la influencia positiva de la naturaleza, desde hace más de una década. Trabaja para diversas publicaciones centradas en los cannabinoides, y publica un contenido digital variado que está respaldado por una profunda sabiduría técnica y una investigación exhaustiva.

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