Cómo Hacer Vino De Marihuana En Casa: 2 Recetas Sencillas
El vino de marihuana está causando sensación en los mercados legales de cannabis. Y aunque pueda parecer una creación moderna, tiene raíces muy antiguas. Sigue leyendo para descubrir más sobre la historia del vino de marihuana y cómo prepararlo en casa.
A medida que las leyes sobre el cannabis continúan cambiando en todo el mundo, la gama de productos de marihuana sigue en aumento. Y como cada vez hay más gente que disfruta del agradable puntillo que proporcionan una copa de vino y un porro, la llegada del vino de marihuana al mercado legal era solo cuestión de tiempo.
Aunque marcas como CannaVines, Rebel Coast y Know Label nos parecen innovadoras con sus vinos tintos, blancos y rosados infundidos con hierba, el arte de combinar vino y cannabis no es algo nuevo.
Vino de marihuana: Un elixir antiguo
El cannabis está considerado uno de los cultivos más antiguos de la humanidad, y los restos arqueológicos indican que el ser humano empezó a domesticar esta planta hace más de 4000 años (Lawler, 2019). El vino también es posiblemente una de las bebidas alcohólicas más antiguas de la historia, ya que data de al menos el quinto milenio a. C. Pero ¿sabías que nuestros antepasados ya combinaban ambas sustancias?
Aunque el vino de marihuana puede parecer un invento moderno, hay restos arqueológicos que indican que los escitas (un antiguo pueblo nómada originario del actual Irán) eran muy aficionados al vino con cannabis (Jones, 2017). Los sitios funerarios y los registros históricos indican que este pueblo consumía vino y marihuana como parte de sus rituales espirituales y diplomáticos, así como con fines holísticos. Se cree que, por ejemplo, los escitas quemaban grandes reservas de semillas de cáñamo en sus tiendas de campaña, dando lugar a lo que muchos fumetas modernos conocen como “hacer un submarino”. Además, los arqueólogos han descubierto unas copas escitas que se parecen mucho a unos braseros que se sospecha que usaban para añadir hierbas como el cannabis al vino. Pero los escitas no fueron el único pueblo antiguo al que le encantaba la marihuana.
También se cree que los seguidores de Dionisio (el dios griego de la fertilidad, el vino, el teatro, los rituales y el éxtasis) eran grandes aficionados al vino fortificado con cannabis (Bennet, 2020). Según Carl Ruck, profesor de Estudios Clásicos de la Universidad de Boston, los vinos antiguos (incluidos los que se mencionan en el Antiguo Testamento) generalmente estaban fortificados y enriquecidos con especias y hierbas. La belladona, el opio y la mandrágora son solo algunos ejemplos de los ingredientes utilizados para crear esos potentes brebajes de la antigüedad. Y dado que numerosas culturas antiguas consumían cannabis con frecuencia, Ruck y otros expertos han llegado a la conclusión de que es muy probable que añadieran hierba a muchas de las bebidas antiguas.
Cómo hacer vino con cannabis en casa
Lamentablemente, no contamos con ninguna receta griega o escita para hacer vino de marihuana. Aun así, aquí te proporcionamos dos sencillas formas de elaborar una bebida potente que recuerda a la que podría haber disfrutado un valiente guerrero escita o un seguidor de Dionisio.
El vino de marihuana puede ser de varios tipos. Por un lado, puedes usar tu variedad favorita para darle a un vino comprado en una tienda los efectos psicoactivos del cannabis. Esta combinación también se conoce como vino de cannabis fortificado, y se puede preparar con distintas especias y aditivos para darle un sabor más rico y complejo.
Otra alternativa es hacer vino de marihuana desde cero, fermentando y preparando el material vegetal del cannabis (como cogollos y recortes) con levadura, fruta, azúcar y otros ingredientes. ¿El resultado? Una bebida potente con un efecto envolvente y un sabor dinámico. Dependiendo de los ingredientes que uses, el vino de cannabis fermentado puede ser realmente exquisito.
A continuación te enseñamos cómo prepararlo en casa de forma fácil; pero primero vamos a ver una receta sencilla de vino de cannabis fortificado hecho con vino comercial.
Cómo hacer vino de marihuana fortificado
El vino fortificado se elabora con hierbas, especias y otros ingredientes (e incluso otras bebidas alcohólicas). La siguiente receta es parecida a la del vino caliente, pero lleva cannabis para darle un toque especial.
Ingredientes
- 1 botella de vino tinto
- Cogollos de marihuana (3,5-7g, dependiendo de lo potente que quieras que sea el vino)
- 8-10 clavos
- 4 vainas de cardamomo
- 2 palitos de canela
- 3-4 anís estrellado
- 4 granos de pimienta
- 1 naranja en rodajas
- 50g de azúcar en bruto
- 1-2 cucharadas de miel
- 50ml de ron, whisky o aguardiente
Utensilios
- Horno
- Bandeja para hornear forrada
- Grinder de hierba
- Infusor de hierbas o bolsitas de té
- Olla grande
Instrucciones
- Calienta el horno a 110°C.
- Tritura los cogollos hasta que tengan una consistencia media, extiéndelos sobre la bandeja de horno forrada, y descarboxílalos durante 30-45 minutos. Revuelve bien una o dos veces para asegurarte de que la hierba se tueste de manera uniforme.
- Pon los cogollos descarboxilados en un infusor de hierbas/especias o en bolsitas de té. Si no tienes ninguna de las dos cosas, puedes preparar una bolsita de té casera cortando una media, haciendo un nudo en unos de los extremos, llenándola con el cannabis y haciendo otro nudo en el otro extremo.
- Vierte el vino en una olla grande junto con todas las especias, el cannabis y las rodajas de naranja. Cuece a fuego lento durante unos minutos, y luego añade el azúcar y la miel. Prueba y corrige el dulzor a tu gusto.
- Deja que el vino se cocine a fuego lento durante 1 hora, con cuidado de que no hierva.
- Puedes tomar el vino caliente y añadir el whisky, ron o aguardiente unos 5-10 minutos antes de servirlo. O puedes dejar que se enfríe y colarlo en un recipiente. Ciérralo bien y guárdalo en la nevera hasta que quieras disfrutar de él.
- Para recalentar el vino de cannabis, viértelo en un cazo grande y caliéntalo a tu gusto.
- Sírvelo en una taza con unas rodajas de naranja, ¡y que aproveche!
Cómo añadir la marihuana al vino
Este método implica añadir cannabis y fruta a una bebida alcohólica similar al vino. Sigue la receta al pie de la letra para familiarizarte con el proceso, y luego personalízala como quieras para mejorar el sabor de tu vino. Ten en cuenta que esta receta lleva recortes de marihuana en lugar de cogollos, lo que da como resultado una bebida deliciosa con un efecto más suave. Aunque se pueden usar cogollos para conseguir un producto final más fuerte, no creemos que sea necesario.
Ingredientes
- Al menos 120 gramos de recortes de cannabis (cuantos más, mejor)
- 2 naranjas
- 1 limón
- 1,4kg de azúcar blanca
- 1 bloque de levadura fresca o levadura de cerveza (Saccharomyces cerevisiae)
Utensilios
- Olla grande
- Jarra
- 2 damajuanas/garrafas de 5 litros esterilizadas
- Válvula airlock de fermentación
- Tubo de sifonado de 1 metro
- Termómetro
- Muselina
- Botellas con cierre hermético
- Opcional: hidrómetro
Instrucciones
- Corta/tritura los recortes de cannabis y ponlos en una de las garrafas.
- Exprime la fruta y vierte el zumo en la garrafa con el cannabis.
- Hierve 3,5 litros de agua en una olla grande.
- Disuelve todo el azúcar en el agua.
- Vierte el agua en la garrafa con la hierba y el zumo de frutas. Cubre la parte superior del recipiente y agítalo para mezclar todo bien.
- En la jarra, mezcla el agua templada (a unos 20°C) con la levadura, y revuelve hasta que estén completamente combinadas. Si el agua está demasiado fría (a menos de 15°C), la levadura no se activará; y si está demasiado caliente (a más de 25°C), podría morir. Usa el termómetro para comprobar la temperatura del agua y asegurarte de que esté dentro del rango adecuado para la levadura.
- Usa el termómetro para comprobar la temperatura del agua de la primera garrafa. Cuando esté dentro del rango adecuado, vierte la mezcla de la levadura.
- Cubre la garrafa y agítala nuevamente para combinar bien todos los ingredientes.
- Añade suficiente agua para llenar el recipiente hasta unos 5cm del cuello.
- Guarda la garrafa en un lugar cálido, oscuro y seco (como una despensa o un armario). La luz y las temperaturas bajas dificultarán la fermentación de tu vino de marihuana.
- Después de 24 horas, cierra la garrafa con la esclusa de aire; esto evitará que el oxígeno entre en el recipiente y dejará escapar el exceso de dióxido de carbono creado por la fermentación de la levadura. No olvides leer las instrucciones que vienen con la esclusa de aire para asegurarte de instalarla correctamente.
- Deja fermentar la mezcla en un lugar cálido, seco y oscuro durante 2-4 semanas. Comprueba cada 2-3 días quitando la esclusa y revolviendo la mezcla con una cuchara esterilizada para asegurarte de que todos los ingredientes permanezcan sumergidos en el agua. Puedes usar un hidrómetro para comprobar la gravedad del vino en ese momento y hacerte una idea de su contenido de alcohol.
- Sabrás que tu vino de cannabis está listo cuando deje de burbujear; una señal de que la levadura ha consumido todo el azúcar disponible.
- Con cuidado de no agitar demasiado el vino, saca la garrafa del lugar donde la has almacenado y ponla en una zona de trabajo limpia. Usa un tubo sifonador para pasar el vino de cannabis de la garrafa, a través de la muselina, al otro recipiente. Ten en cuenta que la mezcla podría tener un aspecto turbio; es normal.
- Cierra la parte superior de la segunda garrafa (que ahora contiene el vino de marihuana sifonado y parcialmente filtrado) con la esclusa de aire.
- Guarda el recipiente sellado en un lugar oscuro durante 1 mes. Esto permitirá que el vino de marihuana envejezca y adquiera más sabor, además de asentar los sedimentos de dentro. Lava y seca la muselina (vas a necesitarla nuevamente en el paso 19).
- Esteriliza las botellas con agua caliente y pon la garrafa en un área de trabajo limpia, teniendo cuidado de no alterar la capa oscura de sedimento del fondo. Si ves que ha empezado a dispersarse (volviendo el vino un de color turbio), deja la garrafa en el sitio y espera a que se asiente de nuevo. Esto puede tardar varias horas.
- Retira la válvula de la parte superior de la garrafa y mete el tubo sifonador en el vino. Mantén el extremo a una distancia de al menos 2cm de la capa de sedimento de la parte inferior de la garrafa.
- Sifona con cuidado tu vino de cannabis a través de la muselina y dentro de las botellas.
- Cierra las botellas herméticamente con tapones o corchos. En el segundo caso, conviene sellar la parte superior de los corchos con cera.
- Tu vino de cannabis ya está listo para beber. Si quieres que tenga un sabor más rico y completo, deja que envejezca durante al menos 2-6 meses más.
- Es posible que se formen sedimentos en el fondo de las botellas. Esto es normal, pero si quieres, puedes colar el vino para eliminar parte de los sedimentos.
¿Cómo se añade CBD al vino?
¿Quieres añadir marihuana a tu vino pero no te convence la idea de mezclar alcohol con el subidón de THC? ¡Prueba a hacer vino de cannabis con CBD! En las dos recetas anteriores se puede sustituir la hierba rica en THC por una variedad de CBD.
Otra alternativa para preparar vino con CBD caliente es añadir suplementos de CBD; pero asegúrate de que sean solubles en agua, como el polvo de cannabis.
¿Cómo se almacena el vino de cannabis?
La forma de almacenar el vino de marihuana dependerá de cómo lo hayas preparado. El vino caliente en un recipiente hermético dura varias semanas en la nevera. Para almacenar el vino caliente que has aprendido a preparar más arriba, te recomendamos verterlo en botellas de vino esterilizadas y sellarlas con un corcho. Asegúrate de llenarlas lo máximo que puedas sin que el vino toque el corcho, ya que esto reducirá la cantidad de oxígeno que hay en la botella y ayudará a que tu vino de cannabis se conserve durante más tiempo. También puedes sellar los corchos de las botellas con cera.
El vino de cannabis casero también se puede almacenar en botellas, y si se hace correctamente, se conservará durante varios meses tanto dentro como fuera del frigorífico. A la hora de embotellar el vino de marihuana artesanal, es importante usar botellas esterilizadas y cerrarlas con un sello hermético. Aunque hay muchas formas de hacer esto, visita la sección de elaboración casera de la Headshop de Zamnesia para encontrar botellas de vidrio, tapones de corona y una máquina taponadora a precios asequibles.
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Para almacenar ambos vinos de cannabis es importante usar productos estériles con el fin de evitar contaminar el producto (lo que aumentará las posibilidades de que se ponga rancio). Además, es fundamental cerrar los recipientes de forma hermética y que haya la menor cantidad posible de aire por encima del vino, para minimizar su oxidación con el tiempo. Aunque tanto el vino caliente como el artesanal se pueden almacenar en la nevera, el segundo podría conservarse mejor en una bodega seca, fresca y oscura, donde su aroma y sabor puedan continuar madurando.
Buena hierba, buen vino y buena compañía
Como la mayoría de las bebidas alcohólicas, el vino de cannabis se disfruta mejor en compañía de buenos amigos, familiares y seres queridos. Además, se aconseja consumirlo con moderación, ya que este antiguo elixir es muy fuerte debido a la combinando del puntillo del vino normal y el subidón/colocón de la marihuana. Así que, sírvete un vaso modesto de glögg con hierba, acomódate, y bebe despacio mientras dejas que su efecto se apodere de ti.
- Bennett, & C. (8 december 2020). The Cannabis-Infused Wine of Dionysus - https://www.cannabisculture.com
- Jones, & J. (12 september 2017). Scythians review â wine, weed and war as the Siberian nomads charge into battle - https://www.theguardian.com
- Lawler, & A. (12 juni 2019). Oldest evidence of marijuana use discovered in 2,500-year-old cemetery in western China - https://www.science.org
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