Cómo Pesar Y Dosificar Psicodélicos De Forma Segura

Miguel Antonio Ordoñez

Periodista independiente del cannabis

Miguel Antonio Ordoñez

Última actualización: Junio 3, 2024

Las sustancias psicoactivas como el LSD y las setas mágicas pueden provocar experiencias extraordinarias, que en ocasiones pueden resultar transformadoras. Pero, dada su gran potencia, estas sustancias deben consumirse de forma responsable. Con los psicodélicos, una de las cosas más importantes es saber cuánto estás consumiendo. Esto no solo aumenta la probabilidad de tener un buen viaje, sino que puede darte una idea de los efectos concretos de una sustancia determinada. Por este y otros motivos, veamos cómo pesar y dosificar los psicodélicos de forma segura.

ANALIZA CUALQUIER SUSTANCIA ANTES DE CONSUMIRLA

¿Verdad que sería genial si pudieras ir a una farmacia o dispensario a comprar unas setas mágicas o un poco de LSD? Por desgracia, aún no hemos llegado a este punto. En su lugar, compramos tripis, setas o pastillas al camello de la esquina. Pero, al comprar estas sustancias en el mercado negro, nunca puedes saber con certeza qué estás recibiendo.

EZ Test Ecstasy

(42)

Ver

Hace un tiempo, el equipo de Vice analizó algunas drogas pilladas en un festival de música del Reino Unido y descubrió que casi todas contenían algún tipo de impureza. Por ejemplo, la “MDMA” – que vendían a £20 por pastilla (unos 23€) – resultó ser media pastilla para la acidez estomacal mezclada con vete a saber qué; y como era de esperar, no produjo ningún efecto. Pero esto no fue lo más preocupante que encontraron. En algunas cápsulas encontraron DMX, una sustancia peligrosa que puede provocar un golpe de calor; y también hallaron otra sustancia aún más peligrosa, la PMA (parametoxianfetamina), un compuesto químico responsable de la muerte de varios asistentes a una fiesta en el Reino Unido en 2015.

ANALÍZALO

En otras palabras, antes de pesar o calcular la dosis de tus pastillas o polvos mágicos, es muy importante que procures identificar qué contienen exactamente. Lo bueno es que, para hacer esto, no necesitas un laboratorio. En Zamnesia puedes adquirir kits para analizar LSD, éxtasis, ketamina, cocaína y otras sustancias. Con el EZ Test LSD, puedes analizar tu muestra para saber si contiene LSD, DMT, psilocibina, psilocina, 5-MeO-DMT o 5-MeO-MiPT, entre otras sustancias.

Una vez sepas qué sustancia tienes exactamente, y su grado de pureza, podrás pesarla y dosificarla de forma segura.

NO TE BASES EN SUPOSICIONES

Algunos psicodélicos son tan potentes que se miden en microgramos; un buen ejemplo de esto es el LSD. Un microgramo es 1 millonésima parte de un gramo, o una milésima parte de un miligramo. Una dosis para principiantes de LSD es de aproximadamente 50µg, que equivale a 0,05mg, una cantidad realmente diminuta. Por tanto, para dosificar de forma segura estas sustancias tan concentradas y potentes no puedes medirlas “a ojo”. Así que no uses “cucharadas”, ni otros métodos poco fiables como el papel cuadriculado para los tripis. Estos métodos son poco precisos, incluso para calcular una dosis de setas o sustancias similares. Lo más probable es que acabes con una dosis demasiado fuerte o demasiado suave, y ninguna de estas situaciones es ideal.

DEBES SABER CUÁNTO QUIERES TOMAR

Obviamente, medir una dosis solo tiene sentido si sabes cuánto quieres consumir. Siempre es mejor empezar con una dosis suave y aumentarla gradualmente si es necesario. De esta manera, puedes familiarizarte con los efectos y cómo evolucionan según la dosis. Normalmente, no se llega al punto de tomar una “dosis heroica”, salvo que seas un psiconauta muy experimentado. Consumir demasiado puede perjudicar tu experiencia psicodélica, aumentando las probabilidades de sufrir un mal viaje.

DOSIS RECOMENDADA DE LSD

Con el LSD, una dosis suave para principiantes empieza con 20-40µg. Entre 90-110µg de LSD es una dosis decente, que te hará tripar con efectos visuales. Cualquier cantidad por encima de 200µg se considera una dosis muy potente.

DOSIS RECOMENDADA DE SETAS MÁGICAS

Con las setas alucinógenas, una dosis suave sería entre 0,5-2,0g y una dosis completa sería entre 2-4g. Toda cantidad superior a esta se considera una “dosis heroica”, recomendada únicamente para psiconautas muy experimentados. Escoge tu dosis en función de tu experiencia con los psicodélicos.

CÓMO PESAR CORRECTAMENTE

Necesitas una buena báscula de precisión. Muchos fumadores de cannabis ya tienen una báscula en casa, capaz de medir hasta una décima o centésima parte de un gramo. Sin duda, esta balanza es útil para la marihuana, pero no es lo suficientemente precisa para nuestro propósito. Para los psicodélicos y otras sustancias potentes similares, necesitamos una balanza de miligramos como la Báscula Digital CT-250 de On Balance.

Esta báscula no solo mide hasta la milésima parte de un gramo (miligramo) – siendo ideal para pesar todo tipo de polvos mágicos, setas alucinógenas y sustancias similares – sino que tiene capacidad para contener hasta 50g de la sustancia que estés pesando.

CÓMO MEDIR CON UNA BÁSCULA DE MILIGRAMOS

1. Busca un lugar tranquilo con el menor movimiento de aire posible, ya que las básculas de miligramos son muy sensibles. Pon la báscula sobre una superficie plana y nivelada, y enciéndela.

2. Para obtener unos resultados más precisos, tendrás que calibrar la balanza. Generalmente, una buena báscula como la CT-250 viene con unos pesos de calibración incluidos. Colócalos en la bandeja y calibra la báscula, según indiquen las instrucciones.

3. Cuando la báscula esté bien calibrada, coloca solamente la bandeja en la superficie de pesado de la báscula y presiona el botón "Tara" o "Cero". Esto configurará la báscula (con la bandeja) a cero, para que no tenga en cuenta el peso de la bandeja cuando peses tus sustancias.

4. ¡Tu báscula ya está lista para usar! Al usarla, añade únicamente cantidades pequeñas de la sustancia a la bandeja, de forma gradual. Para ello, puede ser útil usar una espátula pequeña, un palillo de dientes o algo similar. Sigue añadiendo poco a poco, hasta que la báscula muestre la dosis deseada. Si has añadido demasiado, usa la espátula o el utensilio escogido para quitar parte de la sustancia, hasta llegar a la cantidad óptima.

PREPARACIÓN Y MÁS ALLÁ

Saber qué vas a consumir, y cuánto, es el primer paso (y de gran importancia) para tener una experiencia psicodélica segura y positiva. Pero hay otras cosas a tener en cuenta, que también son sumamente importantes.

Con los psicodélicos, la evolución de tu viaje dependerá enormemente del “set y el setting”. En esta expresión, el “set” hace referencia a tu estado de ánimo y mental, mientras que el “setting” significa el entorno físico donde estás consumiendo la droga y la gente que te acompaña en ese momento.

El “set” es importante, ya que los psicodélicos amplifican los sentimientos. Si tomas setas o LSD cuando sientes ansiedad o depresión, el psicodélico solo hará que estas emociones negativas sean más evidentes y tu experiencia probablemente acabe en un mal viaje.

Lo mismo se aplica al “setting”. No querrás tripar en un lugar desconocido o donde te sientes incómodo, y desde luego no querrás tripar rodeado de gente en quien no confías o que te dé mal rollo. Si es tu primera vez, el mejor sitio para iniciar tu aventura psicodélica es un lugar familiar, como tu casa.

Solo los psiconautas más experimentados deberían plantearse tomar psicodélicos en ambientes más públicos y sociales, como eventos, festivales o al pasear por la ciudad. Para la gente menos experimentada, tripar en un lugar lleno de gente, con todo tipo de acción y movimiento, puede convertirse en una experiencia perturbadora.

LA IMPORTANCIA DE UN COMPAÑERO DE VIAJE

Al tomar cualquier psicodélico, se recomienda hacerlo en presencia de un compañero de viaje. Actuando de cuidador, puede ayudarte a establecer tu dosis ideal y también puede proporcionarte un poco de sabiduría y ánimo si en algún momento sientes miedo o ansiedad. Estas situaciones son totalmente normales y a menudo son fugaces y pasajeras, si no cedes ante ellas. El compañero de viaje puede recordarte esto y mantenerte por buen camino. El cuidador debería ser un amigo de confianza que esté sobrio y que conozca los efectos de los psicodélicos.