Supercropping En La Marihuana: Todo Lo Que Hay Que Saber
El supercropping es un método de entrenamiento práctico y de alto estrés increíblemente efectivo. Si la idea de romper ramas te parece un atentado, no te preocupes. Esta guía de cultivo de supercropping te dará la confianza y las habilidades para aprender a aplicar la técnica correctamente.
Quienes han cultivado marihuana varias veces, pueden elegir entre muchas técnicas avanzadas para maximizar sus cosechas. El supercropping es una de estas técnicas que proporciona resultados récord. ¿Lo mejor de todo? Lo único que necesitas para comenzar es un par de manos firmes y una planta sana.
¿Qué es el supercropping?
El supercropping (o manipulación del tallo) es una técnica de entrenamiento de alto estrés diseñada para provocar una respuesta defensiva en las plantas que da lugar a ejemplares más frondosos y productivos, debido a la respuesta hormonal y al aumento en la producción de cannabinoides. El supercropping consiste en doblar cuidadosamente las ramas para dañar el tejido interno sin romperlas. Después, hay que esperar simplemente alrededor de una semana para que la rama se cure y las plantas serán más grandes y fuertes que antes.
Por supuesto, el factor clave en el supercropping es doblar con mucho cuidado, ya que esta técnica requiere mucha delicadeza. Pero no te preocupes porque te explicaremos todo lo que hay que saber sobre esta técnica para maximizar la productividad, incluidos algunos consejos fundamentales y los errores a evitar.
¿Cuál es la diferencia entre LST y supercropping?
Tanto el entrenamiento de bajo estrés (LST) como el supercropping tienen la misma base: doblar las ramas para controlar el crecimiento de una planta y desencadenar una respuesta al estrés. En el LST hay que atar suavemente las ramas para estimular el crecimiento lateral, guiando a la planta a que en pocas semanas vaya hacia la posición o forma deseada. Con el supercropping, dañas las fibras internas de una rama para doblarla y darle forma. Puedes pensar en el LST como una forma básica de entrenamiento de plantas, y en el supercropping como su equivalente más avanzada.
Beneficios del supercropping en la marihuana
El supercropping es, sin duda, el método de entrenamiento más productivo que no depende de herramientas ni habilidades de cultivo de marihuana demasiado avanzadas. Lo único que hace falta es tener delicadeza y buena mano con las plantas. No obstante, no es el único beneficio que aporta esta técnica.
- Plantas frondosas: Al tener un mayor control sobre la copa y la posición de las ramas, se fomenta un desarrollo más frondoso. Las plantas se mantienen compactas pero también fuertes y vigorosas gracias al nuevo nudo que se crea en el lugar de la curva.
- Cosechas más abundantes: Al doblar con cuidado las ramas en la posición deseada, se maximiza la exposición de la luz en las zonas de desarrollo de cogollos. Cuanto más espacio queda expuesto a las luces de cultivo para que crezcan cogollos, mayores serán las cosechas.
- Mayor potencia: El estrés en las plantas de marihuana es una forma fantástica de aumentar la producción de cannabinoides y terpenos, ya que estos compuestos químicos forman parte del mecanismo de defensa natural de la planta. El supercropping induce el estrés necesario para desencadenar una respuesta de la planta sin dañarla de forma irreparable.
- Mayor penetración de la luz: Una copa más homogénea permite una distribución más uniforme de la luz. Si tienes poco espacio o quieres cultivar varias plantas en un armario de cultivo pequeño, el supercropping garantiza que la luz penetre profundamente en la copa y que las plantas obtengan los recursos que necesitan para prosperar.
- Plantas más resistentes: Con el supercropping las plantas se someten a la justa cantidad de estrés como para no llegar a deteriorarse, más bien, se hacen más grandes y fuertes que antes. Esto puede mejorar su resistencia y estabilidad, aumentando las posibilidades de llegar a la cosecha con grandes resultados.
Cuándo realizar el supercropping en la marihuana
A diferencia de la mayoría de otros métodos de poda y entrenamiento de alto estrés, no hay que tener prisa en empezar a aplicar el supercropping. Aunque el FIM, la poda apical y el LST se realizan en cuanto las plantas desarrollan uno o dos conjuntos de hojas verdaderas en la fase inicial del crecimiento vegetativo, el supercropping requiere un poco más de paciencia.
Momento ideal
Para garantizar los mejores resultados, hay que esperar al menos hasta la semana 3 o 4 de la fase vegetativa. Esto da tiempo a las plantas a desarrollarse y alcanzar una altura de al menos 30cm. Sin embargo, a medida que las plantas de marihuana pasan de la fase vegetativa a la floración, sufren cambios hormonales y el supercropping ya no sería tan efectivo.
Al igual que con la poda apical (o topping), se manipula la distribución de auxinas de la planta para confundirla sobre qué rama es el tallo principal. Cuando una planta pasa a la floración, empieza a dirigir su energía a la producción de cogollos y los tallos se vuelven rígidos, por lo que hay que planificar el supercropping en consecuencia.
Momento ideal para cada variedad
Aunque es preferible esperar hasta la semana 3 o 4 de la fase vegetativa, cada variedad tiene un patrón de crecimiento diferente. Por tanto, hay que programar el supercropping en base a las características de la planta. Algunas variedades tienen una fase vegetativa increíblemente vigorosa antes de ralentizar durante la floración. En este caso, puede que haya que comenzar con el supercropping antes para tener control sobre las ramas y crear una copa homogénea.
Aspectos a tener en cuenta sobre la salud de las plantas
El supercropping es una técnica de alto estrés diseñada para desencadenar la respuesta de supervivencia de una planta. Como tal, la marihuana siempre debe estar en buen estado de salud, con un crecimiento fuerte y sin otros problemas. Si se aplica supercropping a una planta que ya está estresada (por falta de luz, nutrientes o una plaga, por ejemplo) puede provocar un desastre, ya que la planta no es capaz de superar tantas adversidades.
Cómo hacer supercropping en la marihuana
El supercropping es la técnica de entrenamiento de marihuana más práctica que existe, literalmente. Si todo va bien, puede ser un proceso sencillo de dos pasos. No hacen falta herramientas aparte de cinta adhesiva (para cualquier rotura accidental).
Identifica los brotes para hacer supercropping
- Observa tus plantas e identifica la línea imaginaria donde harás el supercropping. Esta se convertirá en la parte superior de la copa, así que asegúrate de que encaje dentro de los límites de tu armario o cuarto de cultivo.
Presiona y dobla
- Las zonas superiores de los brotes, que todavía son flexibles, son las más fáciles de trabajar ya que no habrán desarrollado todavía una corteza demasiado gruesa. Coge la rama (comienza siempre con una rama y no con el tallo principal) y sujétala entre el pulgar y el índice.
- Aprieta suavemente el brote y muévelo un poco a la vez que aplicas presión. En 5-10 segundos, sentirás que el brote es más flácido. Dóblalo lentamente hacia abajo en un ángulo de 90 grados. ¡Esto es el supercropping!
- Repite el proceso con el resto de las ramas (dejando el tallo principal para el final) para obtener plantas frondosas y tupidas con una copa homogénea. Una vez que la planta haya tenido 5-7 días para recuperarse, se formará un nudo grueso en la zona manipulada.
Aplica soporte a la planta
- Un paso final a tener en cuenta es proporcionar un poco de soporte a las plantas, especialmente en las ramas más grandes y gruesas. Si te preocupa la integridad de alguna de las ramas, puedes poner un poco de cinta adhesiva para proteger la curva y mantenerla segura, y retirarla al cabo de una semana aproximadamente.
- También hay que atar suavemente el tallo principal con algunas bridas para plantas porque, de lo contrario, en pocos días se corregirá solo y comenzará a crecer hacia arriba otra vez.
Precauciones de seguridad
Como el primer intento de supercropping no suele salir muy bien, te aconsejamos empezar con una rama y no con el tallo principal. A medida que vayas familiarizándote con la planta, sabrás mejor cuánta presión hay que aplicar. Es probable que cometas errores, especialmente si estás haciendo supercropping en varias plantas.
Si rompes una rama o un tallo principal y descubres una herida abierta en lugar de un brote suave y flexible, no te asustes. Ten la cinta adhesiva a mano, cubre enseguida la herida con un trocito y ten mucho cuidado con el resto de ramas. Lo bueno es que las plantas de marihuana son increíblemente resistentes y, después de unos 10-14 días, la herida se habrá curado lo suficiente como para quitar la cinta.
Desventajas del supercropping en la marihuana
Algunos cultivadores se sentirán decepcionados al saber que el supercropping no es adecuado para las plantas de marihuana autoflorecientes. Sin embargo, algunas variedades autoflorecientes responden bien al LST, así que no pierdas la esperanza. Aunque el supercropping es relativamente fácil de aplicar, hacen falta plantas con un ciclo vegetativo largo para que la técnica sea efectiva. Desgraciadamente, las variedades autoflorecientes no gozan de este lujo. Por lo general, las variedades de marihuana fotoperiódicas necesitan alrededor de 6-8 semanas de crecimiento vegetativo para sacar el máximo partido del supercropping.
Además, en el caso de cultivos más grandes, el supercropping puede requerir demasiado trabajo. En este tipo de situaciones, el SOG o el ScrOG son mejores opciones (y mucho más efectivas en cuestión de tiempo). Dicho esto, si cultivas en casa, tienes paciencia y necesitas plantas discretas, compactas y productivas, el supercropping es el método perfecto. Todo es cuestión de encontrar el equilibrio.
Supercropping: Consejos y trucos avanzados
Una vez que hayas dominado el delicado arte de doblar las ramas de la marihuana, el supercropping es una técnica mucho menos intimidante. Y si crees que puedes maximizar aún más tus cosechas (y habilidades), los siguientes consejos de nivel avanzado son fundamentales.
- Amplía la fase vegetativa: Al concentrar todos tus esfuerzos en doblar cuidadosamente las plantas de marihuana, es fácil olvidar que el proceso sigue siendo estresante. Por tanto, las plantas pueden necesitar algunas semanas más en fase vegetativa para recuperarse. Afortunadamente, una vez que las plantas se recuperen, estarán mejor que nunca, así que, el hecho de tener una fase vegetativa un poco más larga valdrá la pena cuando llegue la cosecha. Vigila de cerca las plantas cuando apliques supercropping y no pases a floración hasta que todas las ramas se hayan curado bien y las plantas estén perfectamente sanas.
- Revisa tu espacio de cultivo: Una vez que te acostumbres al supercropping, te sentirás genial al tener un nivel tan alto de control sobre tus plantas. Pero no olvides que el objetivo del supercropping es ayudar a crear una copa más uniforme y aumentar la exposición a la luz en las zonas de desarrollo de cogollos. Al doblar y fijar las ramas, comprueba cómo está posicionada la planta dentro de tu espacio de cultivo y asegúrate que la estructura goce de una exposición homogénea a la luz. Lo ideal es llenar todos los rincones del espacio de cultivo de manera uniforme.
- Combina supercropping con otras técnicas: El supercropping es solo una herramienta en el arsenal de un cultivador, así que ¿por qué no emplear todo el arsenal? El supercropping funciona increíblemente bien junto al LST, ya que es natural atar el tallo principal. Incluso podrías intentar aplicar poda apical para fomentar el desarrollo de muchas colas, pero asegúrate de hacer una pausa de 1-2 semanas entre la poda apical y el supercropping para que las plantas tengan suficiente tiempo para recuperarse.
Errores frecuentes en el supercropping y cómo evitarlos
El supercropping es una técnica de entrenamiento de nivel intermedio-avanzado, pero eso no significa que no sea apta para principiantes. Solo hay que dedicarle tiempo y paciencia. Y si cometes un error, ¡no te asustes! La planta de marihuana es increíblemente resistente y, siempre y cuando sepas cómo rectificar tus errores, debería recuperarse rápidamente.
- Romper un tallo accidentalmente: Es algo que sucederá seguro, incluso aunque hayas aplicado supercropping cientos de veces. Lo bueno es que todas las roturas, excepto las peores, se pueden reparar con tu inseparable cinta adhesiva. En cuanto notes que la capa exterior de una rama o tallo se rompe, soluciónalo de inmediato con un poco de cinta adhesiva. La mayoría de las plantas se curan a los pocos días. Es normal que se decoloren alrededor de la zona dañada, pero si después de unos días no ves mejoras en la curva, vuelve a poner cinta y espera hasta que se forme el nudo protector.
- Mala circulación del aire: Es fácil dejarse llevar por el supercropping, especialmente cuando ves que se forma una copa increíblemente densa. Sin embargo, esa copa exuberante viene acompañada del riesgo de que se pudran los cogollos. Si notas que hay cogollos afectados, quítalos rápidamente (teniendo cuidado de no tocar ninguna otra planta). Una vez que tengas la certeza de haber eliminado las zonas podridas, poda algunas de las hojas inferiores de abanico y reubica las plantas para garantizar una correcta circulación de aire.
- Plantas con un crecimiento demasiado acelerado: Con las plantas fotoperiódicas, es básicamente el cultivador quien decide cuándo pasarlas de la fase vegetativa a la de floración. Si has aplicado supercropping a tus plantas, pero aún no se ven tan saludables como antes, dales otra semana más para recuperarse. Durante este tiempo, es fundamental establecer un buen ciclo de riego húmedo-seco y garantizar que las plantas estén bien fertilizadas.
Supercropping: Alto riesgo, altas recompensas
Está claro que el supercropping es una técnica de entrenamiento arriesgada y, si no tienes mucha práctica, puede que rompas algunas ramas por el camino. Pero si das suficiente tiempo a las plantas para que se recuperen (y tienes siempre cinta adhesiva a mano), no hay razones para no probar esta técnica de alto estrés.
Al fin y al cabo, un poco de estrés ayuda mucho y el supercropping es una excelente manera de maximizar la potencia y la productividad de la planta. Para dominar este arte, solo hace falta paciencia y practicar doblando las ramas pequeñas antes de pasar al tallo principal.