Guía De Técnicas De Entrenamiento Del Cannabis Para Principiantes

Guía De Técnicas De Entrenamiento Del Cannabis Para Principiantes

Adam Parsons
Adam Parsons
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Cuando hablamos de entrenar las plantas de marihuana, no nos referimos a llevarlas al gimnasio para que hagan pesas. El entrenamiento del cannabis abarca una serie de métodos que, aunque someten a las plantas a cierto estrés, permiten conseguir mayores cosechas y plantas más resistentes y robustas. Aprende todo sobre estos métodos a continuación.

Al cultivar marihuana podemos elegir entre multitud de variedades, desde plantas fotoperiódicas feminizadas de gran tamaño hasta autoflorecientes que prácticamente se cuidan solas. Más allá de dar a las plantas los cuidados básicos y un poco de mantenimiento, los cultivadores no necesitan mucho más para conseguir cosechas abundantes y de buena calidad. Pero si das un paso más allá y usas ciertos métodos, no solo podrás aumentar la cosecha al máximo, sino también mejorar la resistencia de tus plantas y controlar su crecimiento. Las técnicas de entrenamiento de bajo estrés y alto estrés te permiten sacar el máximo provecho de tu cultivo de marihuana. A continuación te explicamos todo lo que necesitas saber.

¿Por qué la gente entrena las plantas de marihuana?

¿Por qué la gente entrena las plantas de marihuana?

Causar estrés a tus plantas de cannabis podría parecer contraproducente. Pero, como con la mayoría de cosas en la vida, es importante hacerlo en el momento adecuado, y en este caso es fundamental esperar a que las plantas sean capaces de tolerar estos métodos. Aunque existen algunas diferencias entre técnicas concretas, en general las plantas suelen entrenarse durante la fase vegetativa, cuando están produciendo ramas y hojas. Para hacerlo en el momento adecuado, se recomienda esperar a que las plantas hayan desarrollado al menos tres pares de hojas verdaderas. Si lo haces antes, podrías matar a las plantas; y si lo haces después, puede que las plantas no tengan tiempo de recuperarse antes de empezar la fase de floración.

Tanto si cultivas en interior como en exterior, hay muchas razones para entrenar la marihuana. Podría decirse que la principal razón es aumentar la calidad y la cantidad de los cogollos. Algunos métodos de entrenamiento te permiten maximizar los recursos para el desarrollo de las flores, para conseguir el mayor número posible de cogollos que puede dar una variedad. La resistencia también es un factor esencial, y algunos métodos de entrenamiento pueden fortalecer tus plantas, haciendo que sean más robustas cuando crecen al aire libre. Por otro lado, si tienes poco espacio para cultivar, las técnicas de entrenamiento pueden ayudarte a controlar las plantas gigantescas para que tengan un tamaño más pequeño y manejable.

Un apunte sobre las autoflorecientes: dado que las autos empiezan a florecer en función de su edad, muchas de las técnicas de entrenamiento mencionadas a continuación no son adecuadas para este tipo de variedades. Sin embargo, los métodos como el LST, una defoliación ligera y el SOG funcionan bien con las autoflorecientes, si se aplican correctamente.

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Técnicas para principiantes

Técnicas para principiantes

Si estás deseando probar las técnicas de entrenamiento en tus plantas, estás de suerte. Entrenar el cannabis no es algo exclusivo de los cultivadores más avanzados; también hay técnicas adecuadas para novatos, que veremos a continuación.

Defoliación

La defoliación consiste en quitar algunas hojas de la planta de forma estratégica, para aumentar la circulación de aire y la penetración de la luz. Aunque no es tan estresante como otras técnicas de entrenamiento, la defoliación es un primer paso muy sencillo para mejorar tus habilidades de cultivo. Aunque quitar hojas de tus queridas plantas parezca una mala idea, este método te ayudará a conseguir cosechas más abundantes y cogollos de mayor calidad. Todavía no se comprende del todo por qué la defoliación da tan buenos resultados, pero siempre y cuando no dejes la planta completamente pelada (recuerda que las hojas son necesarias para hacer la fotosíntesis), esta técnica es un buen punto de partida para que empieces a entrenar tus plantas. A diferencia de la mayoría de métodos incluidos en este artículo, la defoliación suele realizarse en las últimas etapas de la fase vegetativa, y a veces incluso en la fase de floración.

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LST

El entrenamiento de bajo estrés (llamado LST por sus siglas en inglés) consiste en doblar hacia abajo y atar los tallos y ramas, lo que permite que las plantas crezcan de forma más eficaz y productiva. En lugar de quitar las hojas, el LST ayuda a fomentar el crecimiento lateral, lo que aumenta la exposición a la luz en zonas de la planta que, de otro modo, quedarían ensombrecidas. Como resultado, se obtienen más flores en lugar de una única gran cola central, lo que mejorará la calidad de los cogollos en general, y puede que también aumente su cantidad. No hace falta mucha práctica para dominar este método, que funciona bien tanto con variedades feminizadas fotoperiódicas como con autoflorecientes.

Mención honorífica: ScrOG y SOG

Ahora empieza lo bueno. El ScrOG y el SOG son dos técnicas diseñadas para sacar el máximo provecho de tus plantas y tu sistema de cultivo.

El ScrOG (cuyo nombre viene del inglés “screen of green” o malla verde) consiste en usar una malla cuadriculada a través de la cual se entrelazan y crecen las ramas del cannabis. Este sistema mantiene las plantas cerca del suelo y facilita el cultivo. En cambio, el SOG (del inglés “sea of green” o mar verde) consiste en cultivar muchas plantas juntas y forzarlas a florecer mucho antes de lo normal. De este modo, las plantas permanecen pequeñas y forman una canopia grande y uniforme: un mar verde. Aunque pueda parecer extraño limitar la altura de las plantas, el objetivo del SOG es conseguir la máxima cosecha por metro cuadrado, en lugar de la máxima cosecha por planta.

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Técnicas de nivel intermedio

Técnicas de nivel intermedio

Si tienes un poco de experiencia cultivando marihuana, las técnicas de entrenamiento de nivel intermedio podrían ser lo que necesitas. Aunque estos métodos requieren un poco más trabajo y destreza, no dejes que eso te desanime, ya que podrás conseguir buenas cosechas. Si tienes un poco de paciencia, obtendrás una gran recompensa.

Topping

El topping, o poda apical, consiste en cortar la punta del tallo principal de la planta durante la fase vegetativa. Aunque pueda parecer cruel, en realidad esto hace que la planta redistribuya las hormonas del crecimiento y desarrolle dos tallos principales, lo que dará lugar a dos colas principales durante la fase de floración. De este modo, se obtienen mayores cosechas y plantas más bajas y arbustivas.

Además, este proceso puede repetirse varias veces para que se formen más colas. Pero ten en cuenta que, tras hacer topping, las plantas necesitan tiempo para recuperarse (1 semana, más o menos), por lo que la mayoría de cultivadores solo las podan apicalmente entre 1 y 3 veces. Aunque el topping no es un proceso complicado, es fundamental hacerlo en el momento adecuado. Si lo haces demasiado pronto, puede ser catastrófico para el desarrollo de tus plantas; y si lo haces demasiado tarde, reducirás la cosecha. Pero si lo aplicas correctamente, conseguirás una cosecha abundante.

Fimming

El fimming o método FIM (del inglés “fuck, I missed” o “mierda, he fallado”) es un método parecido al topping, pero ligeramente diferente. Esta técnica se descubrió de forma accidental cuando un cultivador se equivocó al hacer un topping a su planta. Con el fimming, el objetivo es quitar aproximadamente el 75% de la punta del tallo de la planta, en lugar de cortarlo todo. Como resultado, se producen hasta cuatro nuevos tallos principales, con lo que aumenta significativamente la formación de cogollos. Como muchos otros métodos de entrenamiento, es preferible aplicar el fimming durante la fase vegetativa. Aunque algunos cultivadores prefieren hacerlo durante la fase de plántula, muchos otros esperan a que la planta haya desarrollado tres pares de hojas verdaderas y mida unos 30cm de altura. Al igual que con el topping, es importante dejar que las plantas descansen durante 1-2 semanas entre un fimming y otro, para darles tiempo a recuperarse.

Lollipopping

A diferencia de las técnicas de entrenamiento que hemos visto hasta ahora, que se centran en la parte superior de la planta, el lollipopping tiene por objetivo la parte inferior. Al eliminar las flores de la parte inferior de la planta, la estimularás para que destine su energía a producir cogollos de mayor calidad en la parte superior. Aunque pueda parecer que este método deja a la planta un poco pelada, confía en nosotros: el fin justifica los medios al hacer lollipopping. Puedes quitar fácilmente las flores con unas tijeras de podar o con las manos. Sin embargo, al usar este método hay que tener buen ojo y buena mano, así que aplícalo con cuidado.

Técnicas avanzadas

Técnicas avanzadas

Los métodos de entrenamiento de nivel avanzado requieren cierta experiencia previa. Estas técnicas, que incluyen el main-lining y el uso de enrejados, pueden aumentar considerablemente la cosecha si se usan correctamente. Al igual que con las técnicas mencionadas arriba, la clave está en hacerlo con cuidado y tener paciencia, así que tómate tu tiempo para hacerlo.

Main-lining

El main-lining ha ganado muchos adeptos entre los cultivadores de marihuana. Esta técnica es una gran forma de maximizar la cosecha y es perfecta para espacios de cultivo pequeños. Básicamente, el main-lining es una combinación de topping, ScrOG y LST que obliga a la planta a crecer lateralmente en lugar de verticalmente, dando lugar a varias colas.

Para lograrlo, hay que quitar todas las ramas y hojas por debajo del tercer nudo. Esto te dejará con dos ramas opuestas, en forma de “Y”. Al doblar hacia abajo y atar estas ramas, la planta dividirá sus nutrientes y demás recursos entre las dos ramas, y con el tiempo brotarán varias colas que acabarán llenas de cogollos.

Enrejado

Los enrejados suelen utilizarse en los cultivos de exterior y son ideales para las plantas que pueden alcanzar gran altura, pero también se pueden usar en interior si hay espacio suficiente. Puede que pienses que un enrejado o espaldera es una estructura de soporte de madera de gran tamaño. Aunque esto es cierto en el caso de la jardinería ornamental, el cultivo de marihuana es una historia diferente. Puedes conseguir un enrejado mucho más ligero usando mallas de poco peso y una estructura de alambre y plástico.

La idea es favorecer el crecimiento de tus plantas, de modo que no solo maximices la producción de cogollos, sino que también mejores la circulación del aire y el uso del espacio de cultivo. Al doblar y entrelazar las ramas a través del enrejado, las plantas crecerán más tupidas y producirán más colas. Aunque puede que necesites cierto tiempo para dominar este método, no hay duda de que los enrejados son muy útiles para cultivar marihuana.

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Técnicas para expertos

Técnicas para expertos

Por último, están las técnicas de nivel experto. Aunque conllevan cierto riesgo, algunos cultivadores afirman que la recompensa bien merece la pena. Así que, si quieres poner a prueba tu destreza entrenando las plantas, estos tres métodos te ayudarán a conseguirlo.

Super cropping

El super cropping es un método duro para las plantas, ¡pero muy eficaz! Básicamente consiste en causar mucho estrés a las plantas para provocar una reacción defensiva. Esta reacción hormonal dará lugar a plantas más tupidas, cargadas de cogollos. Para estresarlas, hay que doblar cuidadosamente las ramas para dañar su tejido interno, sin llegar a romperlas. El super cropping es todo un arte; si aplicas demasiada presión a la rama, la planta sufrirá. Y del mismo modo que con otras técnicas, conviene esperar a que las plantas tengan tres pares de hojas/nudos para aplicar este método.

Monster cropping

¿Alguna vez has querido hacer tus propios esquejes de marihuana? Con el monster cropping puedes hacerlo. Esta técnica consiste en cortar esquejes de una planta madre en floración y hacer que vuelvan a la fase vegetativa; entonces los esquejes echarán raíces y se convertirán en plantas. Aunque este proceso puede ser complicado, puede producir grandes cosechas. Sin embargo, el monster cropping no puede aplicarse a las autoflorecientes, y puede ser un poco complejo incluso para cultivadores de nivel intermedio.

Dividir el tallo

El último método de esta lista es un tanto controvertido. Fue ideado por cultivadores de marihuana colombianos en las décadas de 1960 y 1970, cuando utilizaban un cuchillo para “anillar” los tallos de cannabis un par de semanas antes de la cosecha. ¿Pero por qué querrías alterar una planta que está a punto de dar lo mejor de sí? Se cree que dividir el tallo principal unos 7-10 días antes de la cosecha hace que la planta produzca más resina y terpenos, con lo cual se obtienen cogollos de mayor calidad.

Pero, si se hace demasiado pronto, la planta podría reaccionar negativamente al estrés. Si tienes experiencia cultivando marihuana y quieres aumentar el sabor y la potencia de tus cogollos, este método podría ser para ti. De lo contrario, es mejor que te ciñas a alguno de los métodos mencionados anteriormente.

¿Estás preparado/a para entrenar tus plantas?

¿Estás preparado/a para entrenar tus plantas?

Ahora ya conoces diversas técnicas de entrenamiento de nivel principiante, intermedio, avanzado y experto. Lo único que tienes que hacer es probar la técnica o técnicas que más te gusten, y adentrarte en un nuevo mundo del cultivo de cannabis. Además de conseguir un montón de cogollos, también mejorarás tus habilidades como cultivador, lo que te ayudará a afrontar tus futuros cultivos con mucha más confianza. ¿Pero qué variedad (o variedades) deberías probar? Muy sencillo: visita la Seedshop de Zamnesia y consigue las mejores semillas del mercado.

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